Libreros han calificado de "positiva" la celebración de la Feria del Libro, que se desarrolló a lo largo de toda la semana pasada en los Claustros. Una nueva ubicación y fecha, tras varios años de experimentos con otros espacios y tiempos, que parece que por fin han calado entre el gremio y los lectores. "La afluencia de público ha sido muy buena, sobre todo los fines de semana, aunque las ventas han cubiertos expectativas. Pero en general se puede decir que la experiencia es buena", apuntan desde El Laberinto. "La celebración en los Claustros nos ha parecido un acierto. La gente se sentía cómoda en este espacio. Es cuestión de que el público se acostumbre ya a una fecha y ubicación fijos, pero para ello hay que trabajarlo con tiempo. Seguro que el próximo año todo sale estupendo", dicen desde La Luna Nueva.

Alrededor de media docena entre librerías y editoriales han participado en esta edición, con un programa de actos que englobaba presentaciones, conciertos, talleres, visitas patrimoniales, teatro, encuentros de escritores, conferencias... "Este año ha sido muy bueno. Los Claustros me parece un buen sitio y el público parece que también lo ha visto así. Allí hemos tenido los medios técnicos que necesitábamos para estas actividades. Creo que hemos vivido un año de transición y pienso que esta fecha y sitio son los ideales", precisan desde Beta. En Bomarzo son de la misma opinión, y hacen también un balance positivo de la feria: "ha habido mucho público. Ahora habría que mantener esta fórmula para las próximas ediciones para que la cita se afiance. Esperamos que el próximo año se sumen compañeros que no han podido participar en esta edición. El libro debe ser nuestro pretexto para hacer un gran encuentro cultural cada año".

Todos los libreros coinciden sin embargo en la necesidad de dotar de una mayor difusión por parte del Ayuntamiento a la feria, que no se dio a conocer hasta poco días antes de su apertura.