Cultura

Gitanos de papel, gitanos de verdad

  • La sala Cajasol ofrece hasta el 5 de marzo una exposición en la que se muestra una colección de imágenes y carteles en torno a esta etnia · El objetivo: cuestionar los prejuicios de la sociedad

Llegaron en 1462 a Andalucía y han tenido una larga historia de persecuciones que comienza en 1499 con la nefasta obsesión por la homogeneización cultural y religiosa de los Reyes Católicos, y que continuarán los Austrias y los Borbones, con oprobiosos pasajes, reales decretos y pragmáticas específicamente dictadas contra la comunidad roma. Son los gitanos. Su relevancia en la región es tal que en octubre de 1996, el Parlamento de Andalucía declaró el 22 de noviembre Día de los Gitanos de Andalucía. Una fecha que trata de marcar el final de las persecuciones.

Sin embargo, los prejuicios siguen ahí. Para bien o para mal. Ya sea para colocar a la víctima en el peor de los extremos, en este caso para continuar con una discriminación hacia los gitanos implantada en España desde hace siglos, o para esperar esa faceta de artista que tanto arraigo tienen en esta tierra. Es exigir lo que a lo mejor uno no quiere ser. "El objetivo es mostrar al gitano tal como es en el imaginero español y andaluz, a través de una serie de montajes con la herramienta prensa. Todas las imágenes que se pueden ver aquí han salido de los medios de comunicación", comenta uno de los responsables de la muestra 'Gitanos de papel', Rogelio López Cuenca, que presentó la exposición junto a su colaboradora Elo Vega, y el jefe de Acción Cultural de Cajasol, José Manuel Amores, y que se podrá visitar en la sala Cajasol hasta el 5 de marzo. Una iniciativa, becada por la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía a través del programa de Ayuda a la Investigación Iniciarte, y que cuenta con el patrocinio de la Obra Social de Cajasol.

"Este proyecto -cuenta López Cuenca- es un proceso. Forma parte de una investigación, que queremos que recorra varios puntos de la región. El objetivo es conectar con la situación real de cada comunidad gitana y representarla en esta exposición. Por ello esta muestra es un archivo abierto. Siempre se pueden ir añadiendo nuevas imágenes. Está trenzada en lo local y en lo concreto".

A través de infinidad de imágenes, carteles, viñetas, vídeos, películas, fichas... "se pone en cuestión nuestros prejuicios. La intención es provocar un diálogo lleno de sugerencias, un debate social, no dar una lección a nadie. Es una representación de la realidad. Nada más", dice Elo Vega.

Y así, esta responsable puso como ejemplo imágenes de gitanos haciendo un trabajo, cualquiera, "y que muchos personas no consideran trabajo como tal. Algo así como la labor de las amas de casa, un trabajo que no está remunerado. De aquí, pasamos a la fiesta, a lo que aplaudimos porque pensamos que lo hacen porque les gusta y no porque quizás es un empleo. Es la desvalorización del trabajo de ciertas comunidades". En una de las imágenes, Rajoy da dos besos a una gitana en la Feria de Sevilla. Ella le entrega un clavel. "No nos damos cuenta de que no le hace un regalo al político, simplemente ella está trabajando", explicó como ejemplo Vega.

Entre las curiosidades que se pueden ver en esta sala, está la colección de carteles de feria de todas las ciudades, o un falso estudio científico que se inicia en la viñeta de una bailaora y acaba en el logo del Turismo de España de Miró.

Asimismo, la Obra Social de Cajasol da la posibilidad de hacer guías didácticas de la muestra. Los interesados pueden llamar al teléfono : 956 33 62 94 o dirigirse a silvia@monto.es.

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