Cultura

'Matarilerile', la fantasía se envuelve de realidad en la sala 'ArteaDiario'

  • El artista jerezano José Crespo inaugura hoy su primera exposición individual, en el espacio cultural de Diario de Jerez · Una cita en la que conviven lo posible y lo imposible en un mundo de peces

El apellido Crespo Laínez es bien conocido en los ambientes artísticos de la ciudad. Juan Carlos Crespo es uno de los más ilustres pintores y Quique Crespo está entre los más afortunados diseñadores de cuantos trabajan esta modalidad artística en Jerez. El tercer artista de la saga, menos conocido en los mentideros artísticos, es José Crespo, que se presenta hoy, por primera vez de forma individual, con una obra original, muy personal y llena de atractivos en el espacio cultural de Diario de Jerez, 'ArteaDiario', a las ocho de la tarde, con la muestra 'Matarilerile'.

Inevitablemente el autor habla de la familia, de sus hermanos, del poder de un nombre, "porque ellos son dos artistas con trayectoria y reconocimiento. Para mí, son una auténtica referencia como artistas; pero mi vida pictórica sólo pasa por un entusiasmo creativo que he tenido desde pequeño y que continúa cada vez más acentuado. Lo mío es otra cosa. Ellos son profesionales yo, un autor ilusionado por hacer cosas".

La pintura de José se aparta totalmente de los esquemas habituales, es un mundo imaginario poblado de peces. "Probablemente es lo único que me acerca a la pintura de mis hermanos, el interés por lo fantástico, por la ilustración de un mundo donde lo real y la ficción se confunden. Me interesa un universo de fantasía, donde convivan de forma bien patente lo posible y lo imposible en un mismo escenario".

Y a la pregunta de ¿qué supone presentar una exposición individual con un contenido tan complejo, tan poco habitual? El autor no duda en destacar que "cuando Bernardo Palomo (comisario de la muestra y crítico de arte del Diario), que conocía mi obra, me propuso exponer en 'ArteaDiario', pensé hacer una cosa distinta a lo que había hecho hasta ahora". "Mi profesión de maestro -añade- ha contribuido a que esta pintura haga una especie de guiño a los más pequeños; es algo así como una historia especial con personajes irreales que construyen una realidad cercana. A Bernardo le gustó la idea y comencé a trabajar. Al final ha resultado una historia que puede ser agradable. Me he divertido mucho pintándola".

La muestra, sin duda, lleva el sello Crespo, tan marcado por los mundos imaginarios, y es que José no puede olvidar "quiénes son mis hermanos en la pintura y qué hacen. Puede que haya una leve influencia, que yo no pretendo ni busco. Mi obra no es tan conceptual como la de ellos. Es mucho más sencilla; es mía y cualquier parecido con otra cosa, es puro accidente".

José Crespo es un artista completo, lo mismo pinta, que diseña, que se atreve con algo tan complicado como es la imaginería; un artista que ahora llega a la jerezana sala 'ArteaDiario' con una obra de la que Bernardo Palomo afirma que es "todo un lujo por esa simplicidad tan difícil donde se representa un mundo cercano al que todos, grandes y pequeños, tienen acceso por su infinita claridad".

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