Cultura

La Policía interrumpe el Festival a las tres de la noche por quejas vecinales

  • En la programación, patrocinada por el Ayuntamiento, figuraban conciertos hasta pasadas las 5

La Policía Local interrumpió a las tres y cuarto de la madrugada de ayer el Festival Monkey Week, que se desarrollaba en el Monasterio de la Victoria, cuando aún quedaban dos artistas por actuar, Blasted Mechanism y DJ German Gitano, que tenían previsto subir al escenario a las 3,15 y a las 4,15, respectivamente. Así figuraba en el programa impreso y repartido entre todos los asistentes del festival. En este programa, que incluye esos horarios que superan las tres de la madrugada, figura como el primer patrocinador el Ayuntamiento de El Puerto.

Fuentes municipales indicaron ayer que la presencia de la Policía se produjo debido a unas quejas vecinales. "Si no se hubiera producido ninguna queja, no hubiera sido necesario la llegada de la Policía, pero los vecinos esgrimieron el incumplimiento de horario, por lo que se tuvo que levantar acta, aunque se dejó a los organizadores que pudieran terminar con la programación una vez levantada el acta".

Los organizadores prefirieron interrumpir el Festival, lo que se hizo con un conciso comentario de uno de los responsables en el escenario, anunciando que ya no habría más actuaciones durante esa noche. En una nota de la organización se informaba ayer que el grupo portugués Blasted Mechanism pasaba a actuar en la noche de hoy domingo, "al no poder actuar en el momento previsto por razones ajenas a nosotros". Curándose en salud, los organizadores han ajustado los horarios de los conciertos que quedan y ninguno finalizará ya más tarde de las tres de la madrugada.

El Ayuntamiento elogió ayer la actitud colaboradora de los organizadores en cuanto se les informó de que estaban sobrepasando el horario de cierre que el Ayuntamiento previamente les había concedido, ya que horas antes, el propio alcalde, Enrique Moresco, había acudido a la presentación del Monkey informado de que habría música hasta más allá de las cuatro de la mañana. Con unas pequeñas protestas nada airadas, el público aceptó la decisión y abandonó el recinto sin ninguna alteración del orden.

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