Cultura

Viernes con sabor 'agujetero'

  • El Alcázar acoge esta noche una cita en la que la organización tributará un merecido recuerdo a Manuel Agujetas

"A mí la gente me aprecia, adoran mi cante, lo que pasa es que yo digo la verdad y esa no la quiere oír nadie". Esta simple afirmación, pronunciada en una de las muchas entrevistas concedidas, sirve para definir con claridad quién era Manuel de los Santos Pastor 'Agujetas', un cantaor al que hoy, gracias al esfuerzo de las empresas encargadas de producir los Viernes Flamencos 2016, y en especial de su amigo Miguel Fernández, devolverán a la actualidad. Porque si fuese por el Ayuntamiento....

Su figura es el eje sobre el que girará el segundo Viernes Flamenco, que se celebrará esta noche a partir de las 22 horas en el Patio de San Fernando del Alcázar. Por esta razón, se ha previsto recordar a lo largo de la noche al desaparecido cantaor con un acto protocolario al que ha sido invitada su viuda, Kanako Ikeda.

La velada en sí arrancará con el cante de Alonso Núñez 'Rancapino chico', encargado de romper el hielo al tener que actuar posteriormente en la clausura del ciclo que la Peña Flamenca Juan Villar organiza en el Colegio Santa Teresa de Cádiz. El chiclanero es, sin duda, uno de los metales del momento, pues inyecta de manera dulce el veneno más flamenco. Da pellizco, para entendernos. Ya lo demostró en el pasado homenaje a El Torta y lo está demostrando en cada lugar por el que pasa. Le escoltará Antonio Higuero, que también le respaldará en Cádiz, otra guitarra con el sello de Jerez y cuya forma de acompañar a este tipo de cantaores cadenciosos viene de maravillas.

Detrás de él actuará Tomás Rubichi. Emparentado por su madre con Agujetas, hablamos de una joven voz que intenta abrirse camino apostando por el cante tradicional, el cante puro que dirían los buenos aficionados. Tras su reciente triunfo en la peña Don Antonio Chacón, el jerezano intentará escalar otro peldaño más con esta oportunidad en los Viernes, una cita en la que se estrena oficialmente. Junto a él su primo Domingo Rubichi, otra parte del árbol genealógico de los Agujetas.

El apartado cantaor, y a la postre la propia velada, lo cerrará Antonio Agujetas, que vuelve a esta cita estival 16 años después. Con Antonio, como pasaba con 'El Torta' y este tipo de artistas impredecibles, cualquier cosa puede pasar, pero seguro que su forma de decir el cante, marcada por el sello de su familia y en especial de su padre y su abuelo, nunca defrauda. En los últimos meses, como ocurre con su compañero de cartel, ha levantado pasiones allá por donde ha actuado, ya sea en su tierra, por ejemplo hace unas semanas en la peña La Bulería, donde dejó momentos inolvidables, en Sevilla (que se lo digan a los aficionados de Torres Macarena) o en Córdoba. Le acompañará su primo Domingo Rubichi.

El baile esta vez recaerá en una artista foránea, la almeriense Natalia Delmar 'La Serrata', que se rodeará de un elenco compuesto por Ezequiel Montoya, Farina y Juan Fernández, al cante, la guitarra de David Caro y las palmas de Miguel Rosa.Las entradas cuestan 10 euros en venta anticipada y 12 en taquilla.

En definitiva, una noche para recordar a un cantaor para la historia, y que artísticamente ha dejado su trono sin rey, pese que muchos lo intenten desprestigiar.

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