El complemento perfecto de Juan Pedro Aladro en el estudio de grabación tenía nombre propio, Pepe Torrano. El técnico de sonido se incorporó a la colección en 1983 para tomar el testigo de Miguel Ángel de las Cuevas, encargado de controlar el primer volumen. A partir de entonces, Pepe pasó a ser una pieza fundamental de la saga, siempre controlando lo que acontecía en el estudio Alta Frecuencia de Sevilla, donde se ha llevado 30 años "hasta que me he jubilado", admite.

Durante todo ese tiempo, el murciano fue el encargado, cada mes de julio, de dirigir la grabación, primero en los estudios de la calle Santa Clara y posteriormente, a partir de la década de los noventa, en la calle Goles de Sevilla, donde a día de hoy sigue estando la sede de Alta Frecuencia.

Muchas fueron las anécdotas que vivió detrás de aquella pecera, aunque cuando se le pregunta por aquel acontecimiento Pepe se rinde ante dos nombres propios, La Paquera de Jerez y Rocío Jurado. "La Paquera era un fenómeno extraordinario, yo diría que irrepetible", mientras que al referirse a la chipionera, relata que "ha sido de lo mejor que ha tenido este país, su voz y sus condiciones eran increíbles".

Al igual otros protagonistas de la colección, Torrano resalta "el ambiente" de las grabaciones por encima de todo, y hoy en día, treinta años después de su primera experiencia en el proyecto asegura que Así Canta Nuestra Tierra en Navidad "no ha tenido el reconocimiento que se merecía. Como ocurre siempre en nuestra comunidad, se pondera más lo de fuera que lo nuestro, y en este caso nunca se le ha dado importancia. Pasa lo mismo con el flamenco, una seña de identidad de Andalucía y España, pero que sigue siendo desprestigiado hoy en día por los políticos".