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Cultura

De la variedad a la monotonía

  • Noches de Bohemia cumplirá en julio nueve ediciones divididas en dos etapas

  • La amplitud de géneros contrasta con la poca diversidad de este año

El ciclo Noches de Bohemia ha sido desde el año 2005, fecha en la que el Ayuntamiento lo puso en marcha, uno de las apuestas más significativas dentro de la programación estival de Jerez. Su puesta en marcha tuvo como origen un ciclo anterior denominado 'Noches del Alcázar' que se celebró en el verano de 2004 bajo una propuesta clásica y lírica al estilo del Castillo de San Marcos de El Puerto.

Un año después, el gobierno socialista de Pilar Sánchez, a través de su delegada de Cultura Dolores Barroso, quiso cambiar de rumbo creando las citadas 'Noches de Bohemia' en la que se buscaba una variedad musical mayor. Hasta 2010 se realizó anualmente, pero a partir de entonces, tras el cambio de signo político, el ciclo quedó paralizado hasta que en 2016, de nuevo con gobierno socialista, ahora con Mamen Sánchez y Francisco Camas, regresó del ostracismo.

Curiosamente, fue la canción de Navajita Plateá, el primer grupo en levantar el telón del ciclo, la elegida para denominar a una propuesta que ha tenido épocas esplendorosas y otras no tantas, pero que siempre ha querido amenizar los meses de julio y agosto.

De estas nueve ediciones programadas (contando la de 2018), casi todas tuvieron como principal espacio el Alcázar, aunque no siempre el patio de San Fernando, ya que por ejemplo los conciertos del grupo Meli Tango Quintet y la Gala Lírica en 2005, se celebraron en el patio de armas. Sólo en 2009, coincidiendo con las obras de adecentamiento de este enclave, secambió de ubicación, desplazándose hasta los Museos de la Atalaya.

Si por algo ha destacado 'Noches de Bohemia' ha sido por su variedad estilística, pues desde el primer año, la música de distinta vertiente tuvo su hueco dentro de él. Sólo con decir que en aquel 2005 el cartel lo componían Navajita Plateá, que aportaban el toque actual o de flamenco-vanguardia, Javier Ruibal, un cantautor de sobra conocido, el grupo Meli Tango Quintet, que dirigido por el bandoneonista uruguayo Enrique Tellería se acercaba con la misma elegancia al tango, y una gala lírica, con Elena de la Merced o Marina Pardo, por citar algunas voces, se daba buena cuenta de dicha variedad.

Al segundo año la propuesta aumentó hasta 8 actuaciones, de nuevo dirigida a distintos tipos de públicos, unos amantes del flamenco, con Moraíto, otros a la ópera, con otra gala Lírica, a las nuevas generaciones con David de María, e incluso al jazz, con el trío Lechner-Howes.

En 2007 y en 2008 se llegó a los nueve conciertos, algunos de ellos, sobre todo en 2007, inolvidables, como aquella visita de Donna Hightower a Jerez, Luis Eduardo Aute, Gerardo Núñez, Jorge Drexler, Dulce Pontes, el pianista francés Michel Camilo, Marizza o Noa.

En 2009, el ciclo siguió intentándose acercar a todos los públicos, destinando cada día a un tipo de múisca. Así, por los Museos de la Atalaya pasaron entonces artistas como Pasión Vega, Hevia u Omar Faruk.

En 2010, el último año de la primera etapa, las funciones se redujeron a tres, Pastora Soler, la Orquesta de Colonia y Bendita Locura. Fue un año marcado por la visita histórica a nuestra ciudad del maestro Paco de Lucía, que no pisaba Jerez desde aquellos años sesenta cuando lo hizo gracias a la Cátedra.

La segunda etapa retornó en 2016 y lo hizo con fuerza, nada menos que diez galas, todo un récord. La diversidad siguió siendo la tónica general del ciclo, con nombres como Diego El Cigala y Manuel Lombo dentro del ámbito más aflamencado, la música folk con Gwendal, e incluso el circo, que con 'La Gran Circada' se estrenaba como propuesta en las Noches.

El pasado año la reducción fue drástica, pasándose a la mitad de conciertos. No obstante, en estas cinco actuaciones hubo de todo, desde el humor con Los Morancos a Antonio Carmona o el dueto conformado por Pasión Vega y Noa, que llenaron el Alcázar.

Este año, por contra, la variedad es menor, y al margen de contar con un aire 'aflamencado' en casi todas sus propuestas (sólo Carlos Núñez no huele a flamenco), muchos jerezanos se preguntan si no tendrían cabida otro tipo de propuestas musicales. A ello hay que añadir otro dato inusual, la inclusión dentro del ciclo de una actuación que forma parte de otro evento, el nuevo Festival Internacional de la Guitarra, una circunstancia que nunca había ocurrido.

En cuanto a las participaciones, en estas nueve citas sobresalen David de María, con tres apariciones, seguido de Navajita Plateá, Noa, Pasión Vega, Jorge Pardo y Carlos Núñez, con dos.

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