Baja de los 8.700 puntos

La Bolsa española no para de bajar. Ayer, fue un 0,56%, en su tercer día consecutivo de caídas, arrastrado una sesión más por los bancos, a pesar de las subidas de algunos grandes valores. El selectivo restó 48,70 unidades hasta los 8.677,40 puntos, con lo que continúa en mínimos de diciembre de 2016, y amplió las pérdidas anuales al 13,61%.

Los bancos cerraron todos con pérdidas, a la espera de que el Tribunal Supremo resuelva en dos semanas quién debe pagar el impuesto que grava la constitución de las hipotecas: Sabadell restó un 3,30%; Caixabank, un 2,34%; BBVA, un 2,04%; Bankia, un 1,83%; Santander, un 1,41%; y Bankinter, un 1,36%.

Los presupuestos italianos continúan siendo motivo de preocupación para los inversores, ya que el hombre fuerte del Gobierno italiano, Matteo Salvini, afirmó que el Ejecutivo no cambiará su presupuesto para 2019 aunque la Comisión Europea mande "doce cartas".

Continúa además la incertidumbre sobre el Brexit, en un día en el que el diario The Times publicó que el periodo transitorio para que Gran Bretaña abandone definitivamente la UE se podría extender durante años y no meses como en la propuesta inicial.

Los inversores siguen refugiándose en los mercados de deuda alemán y estadounidense, con bajadas sustanciales en la rentabilidad, aunque estos movimientos no alejaron a los compradores del bono español, cuyo rendimiento también bajó y redujo la prima de riesgo hasta los 123 puntos básicos.

Las bolsas europeas cerraron con pérdidas, excepto Londres, que sumó un 0,11%. Milán restó un 1,69%; Fráncfort, un 0,73%; y París, un 0,29%. El euro se sigue depreciando y se sitúa en 1,139 dólares.