La Bolsa española subió ayer un 0,58% y recuperó los 8.800 puntos, aupada por algunos grandes valores, sobre todo Repsol, y el resto de Europa, en una sesión marcada por el alza del precio del petróleo.

Con la prima de riesgo en 120 puntos básicos, el principal indicador nacional, que rompió con tres jornadas consecutivas a la baja, cerró en 8.815,50 puntos, tras sumar 51 unidades, con lo que reduce las pérdidas anuales al 12,23%, mientras que en la semana pierde un 2,88%.

El Íbex 35, que abrió con una subida del 0,65%, se inclinó por los avances, después de que el jueves registrara una caída del 2,75% y fuese su peor sesión desde la crisis catalana de octubre de 2017.

Uno de los focos de atención de los inversores fue el barril de crudo Brent, referencia en Europa, que se disparó hasta los 63,29 dólares, un 5,38% más que el jueves, tras el acuerdo entre la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y Rusia para reducir la producción de petróleo en 1,2 millones de barriles diarios.

En Europa, donde se conoció que el crecimiento económico se ralentizó un 0,2% en la Eurozona y un 0,3% en la Unión Europea (UE) en el tercer trimestre, la Bolsa de Londres se revalorizó un 1,10%; París, un 0,68% y Milán, un 0,53%, mientras que Fráncfort recortó un 0,21%.

En este contexto, los principales parqués asiáticos terminaron sin rumbo claro, ya que Tokio subió un 0,82%, el CSI 300 de China cerró en tablas y Hong Kong bajó un 0,35%.

En la jornada se conoció que el desempleo en EEUU se mantuvo en el 3,7% en noviembre y se crearon 155.000 nuevos puestos de trabajo, 50.000 menos que lo esperado por los analistas.

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