El último trimestre del año ha empezado con subidas en los principales índices europeos y estadounidenses. No obstante, el miedo a la recesión económica sigue dominando el sentimiento del mercado, con los inversores analizando los índices de gestores de compras (PMI) de septiembre en la Eurozona, que reflejan un deterioro sostenido de la actividad.

En este entorno, la atención del mercado también se ha situado en Europa en la evolución de la guerra en Ucrania, tras la recuperación de Limán, una ciudad que Rusia ha utilizado como centro logístico y que abre la puerta de entrada a la región de Lugansk.

Por su parte, el Gobierno de Reino Unido ha rectificado parte de su plan de estímulos fiscales, eliminando la medida anunciada de reducir el tipo impositivo máximo del 45% del impuesto sobre la renta.

En Europa, el Eurostoxx 50 ganó un 0,72%, y revirtió su tendencia bajista desde el 12 de septiembre. Así, el FTSE MIB destacó con una subida de un 1,57%. El Stoxx 600 repuntó impulsado por las empresas de energía, en su caso apoyada por la posibilidad de que la OPEC recorte la producción de crudo en su reunión de este miércoles, utilities y telecomunicaciones, frente al sector de consumo básico que ha registrado pérdidas.

En España, el Íbex 35 cerró por encima de 7.400 puntos tras subir un 1,29%. Entre sus componentes, las mayores revalorizaciones se situaron en Endesa (3,73%), Arcelor (3,71%) y Solaria (3,68%). En contraste, las mayores caídas se registraron en Sacyr (-1,16%), Amadeus (-0,96%).