El Íbex 35 concluyó ayer la jornada con un alza del 0,54%, lo que llevó al selectivo a situarse en los 8.746,1 enteros, a pesar de que a lo largo de la sesión luchaba por retener los 8.800 puntos.

El principal índice español se comportó así en un escenario marcado por las acusaciones cruzadas entre Estados Unidos y China, aunque éste ultimo decidiera el martes estabilizar el yuan para calmar a los mercados.

El selectivo, que marcó un nuevo mínimo anual y se situó incluso por debajo de la cota psicológica de los 8.700,consiguió terminar en verde tras tres sesiones consecutivas de importantes caídas.

La mayor parte de los valores cerraron en positivo, a excepción de nueve: Repsol (-1,82%), ArcelorMittal (-0,8%), Indra (-0,59%), Telefónica (-0,33%), Banco Santander (-0,31%), BBVA (-0,15%), Mapfre (-0,12%), Acciona (-0,11%) y Bankinter (-0,1%). Al otro lado de la balanza destacaron Meliá (3,81%), Ferrovial (2,54%), Mediaset (2,1%), IAG (1,89%), Masmóvil (1,53%), Siemens Gamesa (1,39%), Grifols (1,39%), Inditex (1,27%), Merlin Properties (1,19%) y Cellnex (1,12%).

El resto de bolsas europeas terminaron también con subidas, del 0,63% en el caso de Francfort y del 0,5% en el de París, mientras que Londres cerró con un alza del 0,33%.

Por otro lado, el precio del barril de petróleo de calidad Brent, referencia para el Viejo Continente, cayó a 56,29 dólares, mientras que el Texas bajaba a 50,79 dólares. La cotización del euro frente al dólar se ampliaba a 1,1233 billetes verdes, mientras que la prima de riesgo española se mantenía en 75 puntos básicos, con el interés exigido al bono a diez años en el 0,176%.