En el día que todos nos unimos contra la violencia de género, los populares jerezanos consideramos importante renovar y difundir nuestro compromiso contra todo tipo de agresión hacia las mujeres. Hoy, como todos los días del año, es importante manifestar la condena absoluta ante la violencia de género y la determinación de que el maltratador no tiene cabida en nuestra sociedad. Todas y cada una de las víctimas deben tener nuestro apoyo incondicional.

En nuestra sociedad, y más ahora en los tiempos que corren, nadie entiende ninguna expresión del uso de la fuerza contra quien se puede hallar en situación de mayor debilidad, física o psicológica. Cada una de las víctimas no sólo es una pérdida irreparable, es un acontecimiento vergonzante, inolvidable y que nos hace a todos, sociedad y poderes públicos, responsables en la lucha contra esta lacra.

A pesar de que no podemos bajar la guardia en esta lucha, es justo reconocer la labor que muchas jerezanas están realizando desde el tejido asociativo y desde el Consejo Local de la Mujer. Combatir la Violencia de Género es una obligación de todas las personas, pero las instituciones públicas tienen la responsabilidad fundamental de promover cuantas acciones sean necesarias para conseguir prevenir y erradicar unas actitudes y comportamientos que hacen sufrir a muchas personas.

La violencia de género es un fenómeno que ha experimentado cambios cuantitativos y cualitativos que necesitan ser analizados y tenidos en cuenta de cara a adoptar nuevas medidas. Desde esta realidad, las instituciones públicas en general y la local en particular, debemos abordar esta expresión de la violencia como una grave violación de los derechos humanos, no sólo de las mujeres, sino también de sus hijas e hijos y, en consecuencia, una cuestión pública, que requiere de la implicación de la sociedad y del conjunto de las instituciones de una forma eficaz y contundente.

La violencia contra las mujeres es un atentado a los derechos humanos cuya erradicación exige el compromiso de la sociedad en su conjunto, con el respaldo de la legislación nacional y autonómica.

Desde el PP hemos demostrado que la tolerancia cero contra los malos tratos no es únicamente una declaración de principios y el Código Penal es, hoy, más firme contra los agresores y se implantaron los juicios rápidos para dar agilidad a los procesos que puedan derivar en situaciones de riesgo para la mujer. Sin embargo, tenemos muy claro que la lucha contra la violencia de género no es exclusiva de ningún partido político o colectivo en exclusividad. Es un reto de todos, de toda la sociedad donde profesionales, instituciones y poderes públicos debemos implicarnos en su erradicación.

Entre todos tenemos la obligación de educar a las nuevas generaciones en el respeto. Debemos enseñar a nuestros adolescentes a que no vale todo y que debemos poner límites a cualquier atisbo de violencia de género entre ellos mismos, en el seno de su familia y sin olvidar la violencia de género en las aulas o con el soporte de las nuevas tecnologías. La unidad de todos, la responsabilidad de todos y la confianza en nuestro sistema son claves para erradicar en origen el maltrato a las mujeres.

Juntos hemos avanzado mucho en el camino contra la violencia machista en España, aunque aún nos queda mucho por recorrer. No partimos de cero porque en las últimas décadas se ha conseguido muchos avances y, a día de hoy, España es un país referente en la Unión Europea en la lucha contra esta violencia. La legislación aprobada, los medios destinados a este fin, la formación de los agentes implicados tanto en el ámbito de la Justicia como en los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y la sensibilización social contra la violencia de género nos hacen ser optimistas de cara al futuro y a todo el trabajo que nos queda. Pero no podemos bajar la guardia.

A lo largo de este año, han sido 44 las mujeres asesinadas en nuestro país. Cualquiera de estas historias de sufrimiento y tragedia es motivo suficiente como para no olvidarnos, para recordarlas siempre y para no bajar la guardia.

Vivas nos queremos, vivas os queremos.