La preapertura apuntaba a una sesión con dudas, pero finalmente el verde se impuso. La excepción fue China, a pesar de la intervención de fondos estatales para garantizar la estabilidad del mercado.

En el mercado de renta fija, se registran caídas de rentabilidad (moderadas, eso sí) en las referencias a 10 años en Europa y EEUU, lo que ayudó en las subidas bursátiles, especialmente en sectores como el tecnológico (Stoxx 600 Technology +2,52%).

También contribuyó la mejora de las previsiones macroeconómicas globales de la OCDE. En su actualización de marzo, el organismo prevé que en 2021 el PIB global crecerá un 5,6% anual, un 1,4% más que lo previsto en su escenario de diciembre. Esta mejora se apoya principalmente en el desarrollo de los planes de vacunación y el avance en la resolución de problemas de distribución y de producción de dosis, si bien destacó el riesgo creciente de divergencia en la recuperación económica.

Los mercados también reaccionaron positivamente a que, según unos estudios preliminares en laboratorio publicados en el New England Journal of Medicine, la vacuna de Pfizer y BioNTech neutralizaría la variante de Covid-19 con origen en Brasil.

Reina el optimismo tras las informaciones que señalan que la Cámara de Representantes de EEUU ha recibido el proyecto de ley del plan de estímulos de 1,9 billones de dólares, aprobado por el Senado el pasado fin de semana, lo que podría acelerar su puesta en marcha. En España, el Íbex 35 avanzó un 0,62%, a un paso de alcanzar el nivel de 8.500 puntos.