A rienda suelta

Francisco Reinoso

Finanzas islámicas

LOS musulmanes tienen prohibido, por la ley coránica, que los préstamos reciban intereses. La sura 2:278 dice así: "Creyentes: temed a Dios y renunciad a las ganancias pendientes de la usura, si es que sois creyentes". Los muslimes no pueden invertir en empresas que se dediquen al juego, la pornografía, el alcohol o el cerdo. Su sistema bancario necesita la certificación de la Charía. El ahorro público o privado se debe invertir en empresas, y sus beneficios o pérdidas recaen sobre los depositantes.

El papa Francisco afirmó que: "Cuando una familia no tiene ni para comer porque tiene que pagar el préstamo a los usureros, eso no es cristiano, es inhumano". Definió como plaga social la usura que se aprovecha de los más débiles. Cerca de cinco mil millones de teóricos creyentes no admiten la usura. Pero al capital le da igual. Así nos va.

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