A RIENDA SUELTA

Fran Pereira

Legal o ético

UNA vez más en esta santa ciudad asistimos con estupor a la destrucción de parte de nuestro patrimonio. El último regalo de los dirigentes ha sido aprobar la demolición de una bodega del siglo XIX de la calle Paúl. Da igual que el ya derruido enclave formase parte de ese urbanismo bodeguero decimonónico de esta ciudad, que durante años nos hizo diferentes, como también da igual que se quiera abrir una puerta en el Alcázar por puro capricho. Sin responsabilidades de por medio, todo vale y si no que se lo pregunten a la Ermita de Guía, escondida desde 2008 en esa mole de ladrillo construida y deshabitada, y que te da la bienvenida al entrar a Jerez. Un desastre. Lo peor es la excusa para argumentar el derribo. Que estaba en el PGOU del año 1995 y que en 2009, fecha en la que se llevó a cabo el Plan General, tampoco se revisó. Sigamos dándole patadas a nuestra historia y destrozando todo lo que un día nos hizo diferentes. ¿Y llamamos a la delegación de Patrimonio? Made in Jerez.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios