EL Grupo Parlamentario Socialista, a través de su portavoz adjunta, la jerezana Mamen Sánchez, resaltó ayer algunas de las partidas más importantes que se incluyen en los Presupuestos Generales del Estado de 2009 para Jerez, sobre todo en lo que a infraestructuras se refiere, caso de los 19 millones de euros que se invertirán en el aeropuerto para terminar las obras del plan director, o los casi 54 millones que se inyectarán en la línea de alta velocidad Utrera-Jerez. Sin duda, el nuevo edificio terminal, así como las mejoras en el campo de vuelo y la pista de rodadura son obras que situarán al aeródromo en el lugar que le corresponde. Y aunque llegue con retraso, también es una buena noticia la notable consignación para la integración del ferrocarril en el tramo de Jerez Norte y su enlace con Sevilla. Todo muy previsible porque así se había anunciado. Pero justo lo contrario ocurre con otra reivindicación histórica: el desdoble Jerez-Dos Hermanas por carretera. Bajo el mismo pretexto que hace un año -que ni siquiera se ha finalizado la redacción del proyecto- tan sólo se recoge en los Presupuestos una cantidad simbólica. Y poco se especifica de proyectos básicos en infraestructuras como son el apeadero de Renfe en el aeropuerto, la integración del ferrocarril en la ciudad o la duplicación de la antigua N-IV a su paso por Jerez. Las ayudas previstas por el plan de reindustrialización tampoco se concretan para relanzar la industria en Jerez. Únicamente se dice que esta ciudad opta a 101 millones en subvenciones previstas para toda la Bahía. Al tiempo, se esperaba en el Ayuntamiento una partida millonaria para la Ciudad del Flamenco. El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, proclamó en Jerez hace un año que el Ejecutivo sería "generoso" con este ambicioso plan, pero por ahora habrá que conformarse únicamente con 375.000 euros. A tenor de que tampoco la Junta de Andalucía ha recibido este proyecto con entusiasmo, será necesario que mucho cambien las cosas para no dilatarlo en el tiempo mucho más de lo previsto. Si insuficiente parece esta última partida, más ridícula es la que recibirá el Villamarta. Los Presupuestos, lejos de sorprender con nuevos proyectos para la ciudad, cumplen el expediente con el mínimo esfuerzo inversor en casi todos los órdenes, salvo en el caso de obras ya iniciadas.