Esta semana hemos conocido el amplio programa de las Fiestas de la Vendimia de este 2019, dedicadas al vecino y querido pueblo de Sanlúcar de Barrameda. Comienzan con la pisa de la uva el 31 de agosto y finalizan a mediados de septiembre. Una extensa programación donde destacan las visitas a bodegas, las catas magistrales del Alcázar o la cita De Copa en Copa en los Claustros de Santo Domingo, entre otras actividades.

Si bien es cierto que la programación está ajustada sobre todo al ámbito vitivinícola haciendo honor al nombre de 'Fiestas de la Vendimia', muchos jerezanos echamos de menos uno de los eventos destacados de los que por entonces conocíamos como Fiestas de Otoño. La Parada Hípica. Una exhibición ecuestre que reunía por las principales calles de Jerez (desde el Parque González Hontoria al centro de la ciudad) a más de 300 equinos procedentes de la Real Escuela Andaluza del Arte Ecuestre, del II Deposito de Sementales, de la Yeguada de la Cartuja, de distintas escuelas jerezanas y de jinetes particulares; poniendo en valor el gran patrimonio ecuestre que tenemos en Jerez, orgullo de nuestra ciudad.

Las Fiestas de la Vendimia podrían alargase, para finalizar con la procesión de la Patrona - que hace ya unos años quisieron ningunear quitándole el festivo - e incluir a la Parada Hípica como se venía haciendo desde años atrás, en las fechas próximas a la procesión de la Virgen de la Merced. Haría bien el Ayuntamiento de Jerez por recuperarla y devolver el esplendor de este espectáculo ecuestre por las calles de Jerez.

Quizás si no encajara en septiembre, podrían ser el gran evento en unas futuras Fiestas de Otoño desde octubre hasta noviembre, animando el centro de la ciudad de actividades jerezanas relacionadas con el mundo ecuestre, el vino y el flamenco.

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