EL archivo de la causa abierta a María José García-Pelayo por la pieza separada de la trama Gürtel en Jerez pone de manifiesto, por si alguien tenía alguna duda, lo arriesgado que resulta siempre dar por hecho un resultado judicial y más en estos tiempos. En este caso, si tiramos de hemeroteca, nos llevaríamos muchas sorpresas y comprobaríamos hasta dónde puede llegar la crueldad en política. Desde los partidos en la oposición al PP, que son prácticamente el resto, a Pelayo se le ha dicho de todo y a cada minuto se le ha pedido su dimisión. El caso Gürtel, de enorme trascendencia a nivel nacional, mancha a cualquiera que se le acerque un poco y rehabilitar política o profesionalmente a alguien que ha estado involucrado en él es una tarea muy difícil. Habrá que ver hasta qué punto el caso Gürtel ha afectado a la carrera política de García-Pelayo, que ahora sí parece claro que repetirá en la lista al Congreso de los Diputados por Cádiz en las elecciones de junio. Tenía razón Saldaña cuando dijo que eso era "tan claro como que al agua da vida". El archivo de la causa contra ella tendrá repercusiones en la política local a buen seguro, habrá que ver hasta qué punto. Bien porque su partido le vuelva a pedir que de nuevo se presente dentro de tres años a la Alcaldía, bien porque el PP dejará de recibir los constantes ataques de sus rivales políticos por ese motivo, que alejaron a la ex alcaldesa del primer plano de la actualidad. Las heridas que deja una experiencia así son difíciles de cerrar para cualquiera. Lo que nadie podrá negar es que el carpetazo a este caso en lo referente a Pelayo trae una buena noticia para la imagen de una ciudad que contemplaba con auténtico estupor desde hace meses la posibilidad de que tres de sus ex alcaldes acabasen en la cárcel. Hoy se puede decir que María José García-Pelayo ha podido escapar en el último minuto de aquel triángulo fatal que ha dejado tantos heridos.