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Tierra de nadie

alberto Núñez Seoane

¡¡"Los chiripas"!!

LO de los "chiripas" griegos -a eso suena el apellido, "Tsipras", a quien los helenos han elegido para que mande ahora en su país- es de auténtico despelote rumbero-populista. Para poner los "pseftokefedes" -albóndigas griegas- encima de la mesa, hay que tenerlos y ellos, los Varufakis -ministro de Economía de Grecia- y compañía, no los tienen, están empeñados.

Nadie, con un mínimo de responsabilidad, coherencia y seriedad -cualidades imprescindibles para solucionar un problema como el que sufre Grecia-, se puede presentar ante quien le ha prestado ingentes cantidades de dinero, que previamente se han aceptado y gastado, imponiendo las condiciones que a él se le antojen, haciéndose -además- el gracioso. Los payasos triunfan en el circo, y en algunas cadenas de televisión, en los foros internacionales en los que se discute la economía que mueve el mundo, lo que hay que llevar son soluciones factibles y constructivas, las memeces se las guarda uno para el fin de semana en el bar, donde los amigotes, borrachos de necedad como "el masca" en cuestión, le rían las sandeces que se le ocurra soltar.

Los esfuerzos que hicieron, a tiempo, los que quisieron y supieron hacerlo: Francia, Alemania o el Reino Unido; los que hicimos, y seguimos haciendo, los que nos salvamos por la campana, España; y los que no tuvieron más remedio que hacer, ya con la soga al cuello, Irlanda y Portugal; son los que tiene que hacer Grecia. El "no pago", "pago lo que me dé la gana" o "pago como me salga de la "entreingle"", queda muy bien, pero es una soberana gilipollez que, obviamente, no se va a aceptar.

Los advenedizos de siempre, los "Robín Hood" de pacotilla, los abrazafarolas trasmutados en políticos… son mucho más letales que el Ébola, la malaria o el "Trypanosoma brucei gambiense" -el de la enfermedad del sueño-; por que matan ilusiones, exterminan esperanzas y fusilan realidades. Lo que queda luego, tras su nefasto paso sobre las vidas de los ciudadanos a los que embaucaron, es sólo miseria.

Los políticos, por naturaleza, tienden a crear problemas que no existen, para que luego les paguemos por buscar soluciones que no saben encontrar y, o mucho me equivoco, o el caso de los "chiripas" será uno más. Sin embargo la solución es evidente y, aunque pueda no parecerlo, sencilla. La solución está en la esencia de la Unión Europea, en las razones que la hicieron nacer, los medios que se pusieron para que fuese una realidad y los acuerdos que hay que respetar para asegurar su continuidad. Todo está ahí.

Lo que queremos todos es que Grecia siga formando parte de la UE, pero para que esto sea así tienen que cumplir con las reglas que todos cumplimos, las mismas que ellos acordaron y las mismas de las que se sirvieron cuando agarraron los 317.000 millones de euros que les hemos prestado. Si no lo hacen, si no pagan o si pretenden pagar lo que quieran o como quieran, entonces la única opción es que la Grecia de "los chiripas" salga de la UE y del euro, y no pasará nada. Bueno, no le pasará nada a la UE, a ellos, a los griegos, si les pasará. Les pasará que se hundirán en la más oscura y profunda de las miserias durante décadas.

Las condiciones para una negociación no las impone Tsipras, ni Varufakis, están escritas y asumidas por todos los miembros de la Unión: o se toman o se dejan y, claro, entonces te vas. Porque, si no es así, ¿a cuento de qué va a pagar España, o Portugal, o Irlanda, o Polonia…?

No hay alternativa ni componenda que sirva a "ideólogos" cantamañanas y cutres, no hay "solución mágica", hay que cumplir, trabajar y pagar.

El pozo en el que está enterrada Grecia no lo abrió la UE, lo cavaron los propios griegos, ciudadanos de un país pobre en el que los funcionarios encargados de recoger la basura cobraban más de 3.000 euros al mes, un país en el que los primeros 17.000 millones de euros de las grandes fortunas están exentos de impuestos, un país en el que más de 3 millones de pensiones se cobraban de forma irregular, un país desangrado por la corrupción, la inmoralidad y la chapuza. Ahora, lo que les toca es limpiarlo, ponerse a trabajar, apretarse el cinturón, pagar y cumplir lo que se firmó. Todo lo que no sea esto es demagogia barata, populismo soez, paparruchas de "los chiripas"...

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