Estamos asistiendo a uno de los momentos más duros y crudos que se recuerdan en nuestra querida ‘piel de toro’, en nuestra querida España. Los políticos de turno se están encargando de ‘esquilmar’ en toda la extensión de la palabra a nuestro país.

Los dos importantes partidos políticos (dígase PP y PSOE ) llevan a cabo el más sangriento pulso político de todos los tiempos. Se llama ‘ansia de poder’.

 Quiero expresar, como ciudadano de a pie, mi total indignación y repulsa al momento político y  social que vive España.

No hay día que pase que no nos desayunemos, merendemos o cenemos con un nuevo caso de ‘corrupción’….y van…..

Los medios de comunicación: Tv, radio o prensa escrita nos ametrallan con continuos casos un día sí y el otro también.

Me queda la tremenda duda de quién dirá la verdad. Me siento políticamente desamparadora. Ya no sé a quién votar. Lo que verdaderamente veo es un ejercicio de ‘acoso y derribo’ por parte del principal partido de la oposición (PSOE), contra el que gobierna hace casi dos años con el respaldo de la mayoría de los españoles (PP).

No quiero defender a unos ni a otros pero ciertamente observo que el PSOE es un mal perdedor; no conoce la ‘democracia’ ni por el forro. Aunque el sistema político que tenemos es teóricamente una democracia, dudo que en la práctica sea así. No soy licenciado en Ciencias Políticas pero como ciudadano me importa muy mucho hacia dónde va esta nave y, sobre todo si nos lleva a puerto seguro.

Ser demócrata, yo lo soy, es remar en la misma dirección. Se puede ser del PP, PSOE, IU, UPyD e incluso carlista, un partido que suena a algo obsoleto pero que cuando llegan unos comicios siempre  aparece en las papeletas, aunque no lo conozca ni la madre que lo ha parido, con todos mis respetos.

Entiendo la democracia como el mejor sistema político si se lleva a la práctica conociendo lo que realmente es. La democracia es respetar en todo momento al de enfrente, sea de la ideología que sea, profese la religión que profese, hable el idioma que hable, sea hombre o mujer o tenga otras  inclinaciones  sexuales como pueda ser la homosexualidad.

La vida de las personas, sus formas de actuar y de vivir no tiene por qué alterar para nada la nuestra. Cada individuo es uno y  merecedor del mayor de los respetos.

No me parece democracia el                         ‘ego’ tan pronunciado en el que vive inmerso el común de los mortales. Solo sabemos ‘arrimar el ascua’ a nuestra  sardina, pero hete aquí que no me refiero al pueblo solo. Me refiero sobre todo a nuestros políticos.

Los políticos van a enriquecerse en todo momento sin importarles ‘un bledo’  el pueblo. Esto es un pulso a ver quién gana en corrupción. Esto parece un combate de dinero. ¡A ver quién se lleva el mejor botín ¡Y mientras, el pueblo viéndolas pasar. No hay justicia social, porque además, salvo raras excepciones, hay pocos políticos que merezcan la pena y si los hay enseguida los quitan de en medio porque pueden descubrir el ‘chollo’ que tienen montado y por ello los delegan a un segundo plano. Para que no ‘píen’. Tenemos una justicia aletargada y manipulada en todos los órdenes. Hay miles de casos de ‘corrupción política’ en la actualidad en nuestro país. Lo gracioso es que vemos a los políticos entrar y salir de las cárceles como ‘Pedro por su casa’.

Nunca llega un juicio, y cuando llega le recortan la pena y oyes a la gente decir: ésta es España y  lo ha sido desde tiempo inmemorial. La España ‘pícara’  donde los mangantes y holgazanes campan a sus anchas. ¡Son los que viven ¡Creo que los jueces y abogados de este país se están frotando las manos. Es su ‘momentazo’, y lo entiendo. Están haciendo su particular agosto durante meses y meses de años y años.

Quizá no les interese que esta interminable ola de corrupción acabe y sean otros  los que vivan mejor que ellos. Lo comento siempre desde el mayor de los respetos. Me gustaría pedirle al presidente de Gobierno, Sr. Rajoy, que hable ya de una vez y nos aclare las dudas que tenemos la mayoría de los españoles. ¡Que hable ¡ ¡Que no tenga miedo ¡. No debe olvidarse, Don Mariano, que le avala una mayoría de españoles que le votaron. Si usted teme es que algo esconde. No debe amedrentarle su oponente, el Sr. Rubalcaba. Ese sí que no puede hablar de moralidad, ni ningún sociata.

En cualquier caso si el Sr. Bárcenas, Lola Cospedal  o usted mismo están implicados en casos de  corrupción hay que juzgarlos y si tienen que ir a la cárcel, a la cárcel.

¡Vamos a dejarnos ya de darles palmaditas en la espalda a tanto chorizo como tiene España! ¡Vamos a dejar de utilizar el dinero de los partidos políticos en comprar jueces para ganar juicios. Jueces por supuesto, corruptos!

¡Entonces y solo entonces habrá democracia en este país!