apunte

José Antonio Carrizosa

El hombre del año

HA sido el hombre de 2008 para todos los medios de comunicación que hacen seguidismo de la tradición creada por la revista Time y eligen en su último número de diciembre al personaje más destacado del año. Realmente, este año Barack Hussein Obama no tenía rival. Lo que está por ver es si el nuevo inquilino de la Casa Blanca va a ser también el hombre de 2009. Nunca desde los tiempos de Kennedy la elección de un presidente de los Estados Unidos había despertado tantas expectativas, dentro y fuera de su país. Y nunca, desde el final de la Segunda Guerra Mundial, se había producido el relevo en la primera potencia mundial en una situación tan difícil. Difícil, sobre todo, por la crisis económica que amenaza cada vez más con convertirse en una depresión sin precedentes en muchas décadas. Pero también por la complicada situación a la que se enfrenta en el terreno internacional. Aunque la lista podría ser mucho mayor, citemos como muestra el incremento del poder y la influencia de Rusia, que amenaza con romper el unilateralismo surgido del final de la Guerra Fría, y el avispero de Oriente Próximo. A nadie se le escapa que con la brutal ofensiva israelí contra Gaza de esta semana, Israel ha querido marcar el terreno para que el nuevo presidente se encuentre con una política de hechos consumados en la zona más caliente del globo. A costa de centenares de víctimas civiles.

Lo que haga en sus primeros meses de mandato va a dar la medida de lo que el primer presidente negro de los Estados Unidos va a ser capaz de hacer en los próximos cuatro años. Inevitablemente, defraudará muchas de las esperanzas que en él se han depositado. Otra cosa sería impensable. Pero, por lo menos, arrancamos 2009 con la perspectiva de un cambio no sólo en la forma de hacer política en los Estados Unidos, sino también en los principios éticos que la mueven. Ello va a influir en el mundo entero. Ojalá Obama ponga las bases de un tiempo nuevo y se convierta, por derecho propio, también en el hombre de 2009.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios