Para cuándo?. Parece que los poderes públicos son duros de oído a tenor del poco caso que prestan a este repetida demanda. Y a ella me sumo desde esta columna, pues me parece que es de justicia dotar a quienes tienen encomendada la seguridad ciudadana de unas instalaciones modernas, funcionales y dotadas de todos los instrumentos que las fuerzas de seguridad precisan en el desempeño de sus funciones. Resulta, cuando menos sorprendente, que las distintas administraciones -Junta y Ayuntamiento- estén empeñadas en hacer de Jerez una ciudad moderna y de corte europeo, y a tal fin pongan todo su afán en que contemos en breve con un nuevo trazado de tranvía urbano, pero por contra no sean capaces de materializar un acuerdo con los responsables de Interior para dotar a nuestra ciudad de una nueva comisaría policial. ¡Que no se está pidiendo nada del otro jueves!. Pues que yo sepa velar por la seguridad e integridad de las personas y de sus bienes es un servicio tan básico como la sanidad o la educación. Un servicio que bien se merece ser prestado en las mejores condiciones.

Y en esto de reclamar unas dignas instalaciones para nuestras fuerzas de seguridad no sirve echarle el balón a los políticos, quienes por cierto ya han presentado la correspondiente iniciativa en la Comisión de Interior del Congreso de los Diputados. Nos compete a cada uno de nosotros alzar la voz para decir alto y claro que Jerez necesita ya de una nueva comisaría. Menos quejas y menos protestas por la tardanza y las colas cuando vamos a renovar el DNI o sacar el pasaporte y más voces unidas a la hora de reivindicar mejores medios, más personal y nuevas dependencias para quienes tienen que realizar esas y otras tareas. Los servidores de lo público y del público también tienen sus derechos laborales, y entre ellos está el de contar con unos espacios físicos y unos recursos técnicos acordes con los tiempos que corren....y esto es justo de lo que carecen en su actual emplazamiento. Menos brindis al sol, menos salir en la foto y más manos a la obra, que cuando se quiere bien que se buscan los euros para emplearlos en asuntos mucho menos urgentes que el que aquí nos ocupa.