Cuidar a los autónomos es cuidar el empleo

Los autónomos tienen cada vez más peso en el mundo laboral, sobre todo entre los más jóvenes. Hay que tomárselos muy en serio

El mundo laboral ha sufrido en las últimas dos décadas cambios revolucionarios que han sido provocados, en gran parte, por la irrupción de las nuevas tecnologías. Entre éstos destaca la masiva proliferación de los trabajadores autónomos, que en Andalucía ascienden ya a 539.000. Mezcla de pequeño empresario y de autoempleado, el autónomo es hoy por hoy uno de los pilares de la economía y el emprendimiento, sobre todo entre los más jóvenes, una vez que el viejo modelo del empleado que desarrollaba prácticamente toda su vida laboral en una sola empresa se ha derrumbado definitivamente. Por eso, las autoridades laborales deben tener muy en serio sus reivindicaciones y, en lo posible, mejorar su situación. Lo cierto es que, hoy por hoy, la gran mayoría de los miembros de este sector se sienten abandonados, con pocos derechos y con una excesiva presión fiscal, problemas que dificultan en gran medida su labor. Eso por no hablar del abuso de una figura tras la que muchas veces se esconde la precariedad laboral.

La consejera de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo, Rocío Blanco, anunció ayer lunes que su departamento va a iniciar la elaboración de una nueva Orden del Trabajo Autónomo que sustituya a la actual normativa de subvenciones, que incluirá novedades como nuevos incentivos a la contratación para los trabajadores autónomos que incorporen a su primer empleado o aumenten su plantilla, además de la simplificación y la eliminación de requisitos para otras ayudas al colectivo. Es una buena iniciativa que en principio ha sido recibida positivamente por la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA) y la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA).

No negaremos que en los últimos tiempos, en Andalucía, se ha avanzado en cuestiones tales como la ampliación de la tarifa plana, la mejora de la protección social de las mujeres autónomas que se incorporan tras la maternidad o el apoyo del emprendimiento rural y de los jóvenes, y que ahora se pretenden tomar medidas para mejorar la conciliación de los autónomos. Pero queda mucho por hacer y, sobre todo, es importante que esta línea ascendente de apoyo a los autónomos se mantenga en los próximos lustros.

En la actualidad, no cabe duda de que todo lo que se haga en favor de los autónomos será provechoso para el empleo y la economía en general. Es un sector que hay que tomarse muy en serio.

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