Las Reales Maestranzas de Caballería fueron creadas por Felipe II por Real Cédula del 6 de septiembre de 1572, herederas de las antiguas hermandades con la finalidad de que hubiese personas entrenadas en la jinetea (montar a caballo) y combatir. Los Maestrantes tenían que estar ejercitados en la guerra y aportar jinetes a sus expensas también ejercitados en la jineta y la guerra para ayudar al Rey y por supuesto al Reino.

Las Maestranzas actualmente han derivado en Corporaciones de Nobleza herederas de aquellas que fundó Felipe II y actualmente se emplean en objetivos altruistas de ayuda a la sociedad civil y militar, donde invierten sus ingresos aquellas que disponen de ellos.

La persona de más autoridad en las Maestranzas es siempre el Rey o alguien de su designación dentro de la Familia Real. Le representa siempre el llamado Teniente de Hermano Mayor que actúa a las órdenes y dictado del Rey.

Quizás la Maestranza más poderosa e influyente en la sociedad es la de Sevilla, que tiene mucha influencia en la sociedad pues emplea sus recursos en financiar becas universitarias, conventos de clausura, comedores de personas sin recursos, y es estímulo y fomento de la tauromaquia.

Santiago de León y Domecq, jerezano, hijo de Fernando León Manjón y Pilar Domecq Aguirre, como otros miembros de su familia, pertenece a esta corporación y ostenta el cargo de mayor responsabilidad, es decir Teniente de Hermano Mayor.

Es la primera vez que un jerezano ocupa este cargo de tanta responsabilidad y categoría. Le obliga a estar en permanente contacto con la Casa de su Majestad el Rey para informarle y actuar a sus dictados. Por supuesto, remontándonos a los orígenes, las Maestranzas eran cuerpos militares y continúan siendo muy respetadas y consideradas en el ejército y recíprocamente el ellas con el Estamento Militar.

Pues bien, en el BOE del miércoles 29 de julio de 2020 – SEC III Pag. 59312 – III Otras Disposiciones – Ministerio de Defensa, dispone un Real Decreto 712/2020 de 28 de julio “por el que se concede la Gran Cruz del Mérito Militar con distintivo blanco a las personas que se citan”.

Todos son Generales, excepto el Excmo. Sr. Don Santiago de León Domecq, lo cual es un reconocimiento y un honor que hace el Estado y el ejército al buen hacer de este caballero jerezano por colaboración con la cultura, el ejército y la sociedad.

Está casado con la jerezana Doña Rocío Morenés y Solís Beaumont, que el año pasado amadrinó a una fragata entregándole su bandera.

Es un orgullo para la sociedad que haya personas que entreguen su tiempo y su valía personal altruistamente sin otra compensación que reconocimientos de esta naturaleza y su propia satisfacción personal, en una Nación en la cual estamos contemplando desde hace décadas que apenas hay personas que no sucumban a la corrupción y al saqueo de los erarios públicos. Por eso es de destacar la trayectoria de este jerezano ejemplar cuya limpia trayectoria, como la es la de su Majestad el Rey Felipe VI, es reconocida con este honor.