En la madrugada del jueves al viernes se produjo en la urbanización portuense de Valdelagrana un intento de robo en una vivienda mientras sus propietarios dormían. El ladrón no llegó a entrar en la casa porque la familia se despertó y lo sorprendió en el jardín.

En torno a las dos y media la hija de la familia se despertó al escuchar unos golpes y dio el aviso a los padres. El propietario de la casa bajó a la planta inferior, de donde parecía proceder el ruido, y, tras darse cuenta de que uno de los ventanales del salón estaba forzado, lo abrió y vio a un individuo en el jardín que salió corriendo al percatarse de su presencia.

Habían intentado abrir el ventanal forzando el marco y el picaporte, donde incluso habían realizado agujeros con un taladro. Al parecer, al no conseguir abrir la ventana mediante este método, lo intentó haciendo palanca con algunas herramientas. Fueron los repetidos intentos de forzar la ventana los que despertaron a los propietarios .

El matrimonio llamó a la Policía Local que, en poco más de cinco minutos, se personó en la casa y realizó un rastreo de la vivienda y sus alrededores sin encontrar ya a ningún sospechoso.

Por la mañana, la familia interpuso la pertinente denuncia en la Comisaría y efectivos de la Policía Científica se desplazaron al lugar de los hechos para investigar.

Superado el susto inicial, los dueños de la vivienda declaraban ayer que lo que más impresión les había causado es que los intrusos intentaron acceder a la casa sin importarle que ellos estuvieran dentro. El padre de la familia señaló que cuando abrió la ventana no se lo pensó, pero admitió que tuvo la suerte de que el ladrón huyese al verlo.