DESPUÉS ES

Éxitos y fracasos

A todos los recibieron como héroes al regreso, con bandas de música y calor popular. “El Pleno del Ayuntamiento de Écija aprobó poner nuestro nombre a una calle. Hasta hoy”, dice Lola, de Son de Sol. Ellas han mantenido su academia de baile y han sacado un nuevo disco. Eva se dedica al teatro y Rosa López sigue teniendo miles de fans. Para algunos, sin embargo, Eurovisión ha tenido un cierto mal fario. Lucía, que no ha querido hablar de su experiencia en el festival, permanece en la sombra desde que concursó en 2003 en el reality show La granja de los famosos. Las Ketchup, después del bombazo de Aserejé, “han desaparecido del mapa”, según sus anteriores representantes. Anabel Conde da nombre a una plaza de Fuengirola, su ciudad natal, y forma parte de la orquesta Alcatraz, pero su carrera no despegó desde entonces”. Remedios Amaya, “una de las más grandes del flamenco, según Queco, fue ridiculizada porque no obtuvo ningún punto en Munich (1983)”. La trianera, que salió a cantar descalza, a pesar de que pensaba que le daría mala suerte, se mantuvo fuera de los escenarios hasta su reaparición en 1997 con Turai Turai, de la mano de Vicente Amigo. Haciendo realmente lo suyo, flamenco. Y vendió 150.000 copias.

Tags

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios