La disposición de los granadinos a abandonar el transporte privado en los últimos diez años también ha sufrido un cambio sustancial. Se refleja en la última encuesta sobre modos de desplazamiento realizada por el área de Movilidad.

La encuesta desvela que en torno al 10% de los granadinos anda de 2 a 3 kilómetros al día, y que en torno a un 5% recorre de 3 a 5 kilómetros a pie. Lógicamente en distancias más pequeñas los resultados se disparan, llegando al 80% los granadinos que optan por ir andando cuando las distancias no superan los mil metros.

Pero esto no siempre ha sido así siempre. "Hace unos años la gente utilizaba el coche para todo, hoy hay más conciencia de la necesidad de andar, primero por temas de salud y luego por las dificultades en los desplazamientos en coche", reconocen desde el área de Movilidad del Ayuntamiento. Hay una causa más. En torno a los años 80 el vehículo particular se asociaba a un alto estatus, era símbolo del desarrollo y pocos renunciaban a su uso para desplazarse por la ciudad. De ahí que las primeras medidas que se tomaron para limitar el uso del vehículo privado tuvieran que ser drásticas: pilonas, barreras físicas que impidieran el paso de vehículos.

Este cambio de mentalidad ha hecho que prácticamente nadie utilice el vehículo en la ciudad para hacer desplazamientos inferiores a los tres kilómetros. El problema se plantea con la población que trabaja en Granada pero que viene de fuera de la capital. Esta bolsa de conductores representa la mitad de los desplazamientos que se registran en la ciudad a diario. "La ciudad tiene que estar diseñada para que estas personas se puedan desplazar en transporte público por la ciudad una vez que llegan a Granada", explican desde el área de Movilidad. Para ello es fundamental que existan aparcamientos periféricos, que se amplien las zonas peatonales y el transporte público.

"El 70 por ciento de los ciudadanos estaría dispuesto a que se sacaran los coches de la ciudad y casi dos terceras partes de los conductores están convencidos de que el coche no soluciona los problemas de tráfico de la ciudad", apuntan los técnicos del área municipal, que insisten con estos datos en la necesidad de encaminar las políticas que se desarrollan en movilidad hacia el peatón y el transporte público.