El Centro de Formación de Tropa número 2 (CEFOT-2) del Acuartelamiento de Camposoto recibe este lunes a los alumnos del primer ciclo de 2020 para su instrucción. No estarán todos, de los 849 alumnos admitidos solo llegarán 424. La división en dos turnos es una de las medidas que los responsables han tomado para adaptarse a las circunstancias actuales, a la pandemia del covid-19 que la sociedad afronta con restricciones. La combinación de formación presencial y formación online y el acondicionamiento de los espacios son otras de las acciones preparadas.

"Se están haciendo las cosas lo mejor posible. Por eso queremos dar un mensaje de tranquilidad a la población civil, especialmente de San Fernando, de que el centro está preparado", apunta el teniente coronel José Antonio Benítez Morales, jefe de la Plana Mayor de Dirección del CEFOT-2. De hecho, el Servicio de Sanidad está formado por una teniente coronel médico, "neumóloga, que ha estado comisionado en los últimos meses en la UCI del hospital Gómez Ulla", precisa Jaime Mora-Figueroa Silos, subdirector del CEFOT-2; dos oficiales enfermeras, dos oficiales psicólogas y un oficial veterinario, que ha estado en la operación Balmis, y que está encargado de controlar y dirigir las desinfecciones del centro.

Ellos cuidarán de atender a los aspirantes a tropa, desde su llegada –cuando serán sometidos a un test rápido para detectar coronavirus– y a lo largo de su instrucción para controlar su estado de salud, ante posibles indicios que obliguen a aplicar el plan de contingencia creado, que establece el aislamiento del alumno en locales previstos para ello, la realización de PCR, el aislamiento de los contactos estrechos, la cuarentena si se confirma el positivo... "La unidad de vigilancia epidemiológica, que componen las dos oficiales enfermeras y dos sanitarios, se encargará del rastreo en el entorno militar, tanto del alumno afectado como del personal que pudiera dar positivo, pero si tenemos datos del círculo civil se alimentaría a la sanidad pública para que sigan el brote", explica Benítez Morales.

Una de las aulas de tipo sección del CEFOT-2 con carteles de no usar en mesas alternas.

Los primeros 424 alumnos del primer ciclo de formación de 2020 llegarán el lunes y permanecerán durante 15 días en el acuartelamiento en el periodo de orientación a la vida militar. "Hemos recibido la orden de que hasta el 30 de septiembre por el momento los alumnos no podrán salir del acuartelamiento ni para ir a sus casas, ni para estar en la ciudad", aclara el subdirector del CEFOT-2. Ni siquiera saldrán para las dos maniobras habituales de la instrucción, que realizarán en el campo de maniobras de las dependencias de Camposoto. No se sabe si las dos juras de bandera podrán contar con la asistencia de los familiares.

El primer turno se marchará después de esta primera toma de contacto y el 7 septiembre, tras la desinfección de las instalaciones, entrará el segundo grupo, con 425 alumnos. Aunque la estancia será rotatoria, este segundo turno seguirá cuatro semanas más después de los primeros 15 días, para a continuación retornar el primer turno (que serán sometidos de nuevo a test rápidos).

La intención es desarrollar en los periodos presenciales cuantas más prácticas mejor, y dejar la parte más teórica para la formación virtual. "El personal que no es del centro se ha estado formando en herramientas tecnológicas la última semana", cuenta Mora-Figueroa. En el CEFOT-2, recuerda, están familiarizados porque reciben continuamente formación semipresencial, incluso llegaron a ponerlo en práctica para terminar el ciclo anterior al tener que mandar a casa por el confinamiento a los aspirantes a militar de tropa. Las clases virtuales serán posibles con el uso del Campus Virtual Corporativo de la Defensa, una plataforma para cursos a distancia que ahora utilizará la tropa.

Cantina del Acuartelamiento de Camposoto.

Las distintas dependencias y estancias que ocuparán durante la formación se han adaptado, con la implicación intensa de la Unidad de Servicio  de Acuartelamiento (USAC) –una de las unidades existentes en el cuartel– que se encarga de la infraestructura. Se han instalado dispensadores de hidrogel en multitud de puntos, se han colocado mamparas como en la Oficina de Apoyo al Personal, se han creado circuitos de entrada y salida separados, se han bloqueado pasillos y habilitado distintos accesos en las naves de las habitaciones para evitar cruces entre quienes vayan a dormir abajo y los que estén en el piso de arriba. Las camaretas de seis camas serán usadas por solo tres personas, sin que los del primer turno y los del segundo lleguen a usar las mismas camas.

En el comedor solo se habilitará una de las dos líneas de servicio existentes que se protege con mamparas y las mesas serán ocupadas por tres o cuatro personas, no más. Igual ocurre en la cantina, cuya empresa concesionaria también ha tomado medidas de higiene y para garantizar el distanciamiento social.

Almacén de equipamiento con señales del recorrido dispuesto.

La sala multiusos, conocida como cine, reduce su capacidad de 300 a 120 personas aproximadamente, describe el teniente coronel Benítez. "Las aulas de sección reducen su capacidad de 64 a 32 personas. Cada una será usada por un pelotón, el grupo estable de convivencia que formarán entre 20 y 25 personas y que funcionará a modo de burbuja al interactuar lo mínimo con otros grupos. Se encargará tras cada clase diaria de la desinfección de la estancia con una mochila de fumigación asignada", detalla.

El CEFOT-2 se presenta preparado con todas estas medidas para iniciar un nuevo periodo lectivo.