Educación

El claustro de la Escuela San José de San Fernando muestra su rechazo a la asignación de centros a sus alumnos

  • Los docentes califican de "despropósito" la gestión de la Junta

  • El futuro de los alumnos de formación profesional básica en el aire o la asignación de plaza en modalidades de Bachillerato contrarias a las solicitadas, algunas de las cuestiones criticadas

Fachada de la Escuela San José.

Fachada de la Escuela San José. / Sonia Ramos

El claustro de profesores de la Escuela San José de San Fernando muestra su "más enérgico rechazo" a la gestión de la Delegación Territorial de Educación en la recolocación de los alumnos del centro para el próximo curso, ante "el terrible hecho de que nuestros alumnos tengan que abandonar la Escuela debido al incomprensible cierre".

El colectivo de docentes explica que la semana pasada la Junta de Andalucía publicó las listas de adjudicaciones de las plazas escolares. "Habida cuenta del carácter particular que rodeaba la solicitud de centros por parte de nuestro alumnado, todos pensábamos que la Administración daría una respuesta excepcional a una situación excepcional", matiza. Para su sorpresa, "más allá de facilitarles el cambio, un gran número de nuestros alumnos, muchos de ellos juntos desde los tres años, han sido asignados a centros que ni siquiera habían solicitado". Se dan casos, se queja, de estudiantes que han solicitado cursar estudios de un itinerario concreto o que están en una modalidad concreta de Bachillerato "se les ha asignado la contraria".

Tampoco se ha dado solución, advierte el claustro, a los alumnos de San José de primero de Formación Profesional Básica, que "aún no saben cuál será su destino para el próximo curso", puesto que además la Escuela "es el único centro que imparte dicha modalidad de FPB". "Esta incertidumbre ha provocado el abandono de sus estudios en algunos alumnos, frustrados por la lamentable situación; alumnos con necesidades educativas especiales y de difícil inclusión", critican.

Para el colectivo se trata de un "despropósito, que no viene sino a hundir más a estos chicos y chicas en un momento difícil de sus vidas como adolescentes". "Están sufriendo en sus propias carnes la incertidumbre de su futuro, creándoles estados de ansiedad y de estrés que han conllevado la merma de su rendimiento académico. Los profesores les bridamos nuestro apoyo", apuntan

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