Gran jornada de veneraciones a pesar del fresco

Jerez/El tiempo no acabó de romper en el segundo domingo de esta Cuaresma casi novedosa si se tiene en cuenta que se viene de dos años de muchos problemas debidos a la pandemia.

Algo de sol por la mañana, poco viendo y cierto fresco en la sombra. Sin embargo, la meteorología no impidió que muchos cofrades y devotos salieran a las calles para disfrutar de las distintas veneraciones. Veneraciones donde ya no hay beso que valga a las imágenes y que ya parece estar establecido en este tipo de actos. Las imágenes sufren menos que cuando el devoto depositaba el beso y ahora se observa aquella costumbre casi ancestral como un signo que dejaba, quizá, mucho que desear por aquello de la salubridad. Opiniones habrá para todos los gustos. Está claro. Y cada argumento llevará su parte de razón.

Por hacer un rápido repaso, la Virgen de la Paz estuvo en la capilla de los Desamparados mimada por sus hermanos de la Coronación en una brillante exposición. Sobriedad y buen gusto en la hermandad próxima y hermana de Loreto en San Pedro. Muchas personas acudieron a la veneración en Fátima, donde los dos titulares estuvieron expuestos a los devotos. Y con aires de barrio y elegancia, como saben hacer los hermanos de la Zona Sur, la Virgen del Amparo.

El Señor del Consuelo lució con su Madre Bendita de la Misericordia vestida de negro por el recordado tío Carlos. Nuevos bríos e ilusión se dejaron ver en la Salvación para un nuevo Martes Santo. Y en la Catedral, la Niña Bonita del Socorro que es una rosa blanca.

En Cristina hubo movimiento durante toda la jornada. La Virgen del Traspaso y el Señor Orando en el Huerto en Santo Domingo. Ahí es nada. Dos hermandades grandes con dos imágenes que no pueden faltar en las cofradías jerezanas. Tiempo desapacible a ratos. Pero que no impidió que el domingo de Cuaresma luciera con ilusión para lo que resta hasta la Semana Santa.