El Papa Francisco ha animado a defender la vida "desde el vientre de la madre hasta el fin en esta tierra", durante el Ángelus de este domingo, en el que ha lanzado un mensaje de apoyo a los movimientos y asociaciones que defienden y promueven la vida. En esta línea, ha subrayado que "cada hijo es un regalo de Dios", "un regalo para la familia" y ha pedido por que cada uno se sienta llamado "a amar y servir a la vida", sobre todo cuando es "frágil" y necesita más atención.

Por otro lado, el Papa Francisco ha ensalzado el papel de las personas consagradas, en especial de las religiosas. "¿Qué pasaría si no estuvieran las monjas? Hospitales sin monjas, escuelas sin monjas. ¡Es impensable!! Son grandes estas mujeres¡", ha señalado con motivo de la jornada dedicada a la vida consagrada. Nada más asomarse al balcón de su estudio, el Papa se ha dirigido a las miles de personas concentradas en la Plaza de San Pedro y ha elogiado que estuvieran bajo la lluvia: "¡Estáis todos mojados, allí! ¡Sois valientes!", ha dicho.

En la jornada de la vida consagrada, el Papa ha comentado que las personas consagradas pertenecen "a Dios de modo pleno y exclusivo" y ha subrayado "la importancia para la Iglesia" de las vocaciones religiosas. En este sentido, ha explicado que el pasaje del Evangelio en el que María y José llevan a Jesús al Templo es una imagen que refleja la "donación de la propia vida", y que este regalo a Dios refiere a "todos los cristianos". Asimismo, ha subrayado que todos los cristianos están llamados a hacer de su vida un regalo "en la familia, en el trabajo, en el servicio a la Iglesia, en las obras de misericordia".

Por ello, ha encomiado la labor de los consagrados que "fortalecen la difusión del Evangelio", que se comprometen con la "formación humana y espiritual de los jóvenes", que "ayudan a los más necesitados", que se dedican a la "oración contemplativa" y que se involucran "con la justicia y la paz".  Francisco ha pedido oraciones para que muchos jóvenes "digan sí al Señor". Francisco ha dirigido un saludo especial para los peregrinos españoles de Villafranca de los Barros y Zafra.