Una mujer ha muerto al recibir un tiro en un atraco ocurrido en la sucursal que Caja Rural Castilla-La Mancha tiene en la localidad toledana de Santa Cruz de Retamar. Según han informado fuentes de la Guardia Civil y del municipio, la fallecida, Mercedes Cabrero García, era empleada de la empresa de limpieza de la entidad desde hace treinta años, un empleo que antes había desempeñado su madre. La víctima, de unos 60 años, ha recibido los disparos cuando los trabajadores de la entidad estaban siendo amordazados por los atracadores.

Según ha explicado el responsable de prensa de la entidad financiera, Javier Rodríguez, los hechos han ocurrido entre las 8 y las 8:30, cuando las tres empleadas de la entidad y el director territorial de zona -que visitaba esta sucursal- han llegado a la oficina. Allí les aguardaban tres individuos con la cara tapada que, a punta de pistola, les han introducido en una sala y les han amordazado. En esos momentos, estos trabajadores de Caja Rural Castilla-La Mancha han oído un disparo, según Rodríguez, quien ha añadido: "el nerviosismo allí es brutal". Javier Rodríguez ha indicado que todo apunta a que los atracadores se han dado a la fuga sin detenerse a coger dinero, y ha agregado que en estos momentos el juez está dentro de la sucursal instruyendo diligencias.

El presidente de la entidad financiera, Andrés Gómez Mora, ha trasladado su pésame a la familia de la fallecida y su indignación por lo ocurrido, pues -ha dicho- "no hay ningún derecho ni justificación" para arrebatar la vida a una persona, que "sentíamos como nuestra". Los vecinos del pueblo, situado en el oeste de Toledo a 60 kilómetros de Madrid por la autovía A-5, permanecen conmocionados por el suceso.

Fuentes de la Delegación del Gobierno han informado de la detención de una persona por estos hechos y han asegurado que la investigación permanece abierta.