El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, pidió ayer, en el Día Internacional de las Personas Mayores, que se garantice la dignidad y el bienestar de este colectivo, y denunció que, a pesar del compromiso de los distintos países de eliminar la discriminación contra estas personas, sus derechos son violados todos los días.

En este sentido, Ki-moon recordó que en la Segunda Asamblea Mundial sobre el Envejecimiento, que se celebró en Madrid en 2002, los Estados miembros se comprometieron a eliminar todas las formas de discriminación, incluida la concerniente a la edad. "Pese a este compromiso, en muchos lugares del mundo se violan los derechos de las personas mayores cada día", aseguró.

"Las personas mayores a menudo sufren discriminación en los lugares de trabajo. En los ambientes sociales, pueden sufrir falta de reconocimiento y de respeto. Se les puede privar de una inclusión y una participación plena en los asuntos sociales, económicos, culturales y políticos", enumeró Ban en declaraciones recogidas por el Centro de Noticias de la ONU. "Y aún más alarmante es que en muchos países los incidentes de negligencia, abuso y violencia contra las personas mayores no son del todo hechos raros o aislados", aseguró Ban Ki-moon.

La primera revisión y evaluación del Plan de Acción de Madrid sobre el Envejecimiento demuestra, a su juicio, que aún queda mucho por hacer a nivel nacional para apoyar a las personas mayores, fomentar su protección en lo relativo a la seguridad de sus ingresos y a la protección social, así como garantizar que gozan de una atención médica de calidad y de servicios de atención a largo plazo. "Para hacer esto posible, las políticas nacionales específicas de envejecimiento deben mejorar considerablemente, y las preocupaciones de las personas mayores deben situarse en un marco político más amplio", recomendó el secretario general de Naciones Unidas.

Ban destacó la idoneidad del tema de este año del Día Internacional -Los derechos de las personas mayores-, ya que en 2008 la ONU recuerda que hace 60 años se aprobó la Declaración Universal de los Derechos Humanos. "Este Día Internacional es una oportunidad para estimular el debate sobre la consolidación de los derechos de las personas mayores y el refuerzo de las alianzas cuyo objetivo es asegurar su plena participación en la sociedad", concluyó Ki-moon.

Las necesidades aumentan si tenemos en cuenta la revolución demográfica que experimenta el mundo entero. Actualmente, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) hay alrededor de 600 millones de personas de más de 60 años y, la OMS estima que el número se duplicará hacia el año 2025. En un mundo que envejece cada vez más rápido, las personas mayores desempeñarán un papel fundamental, lejos de las ideas que intentan atribuir este período de la vida con la decadencia.

En España, existen más de siete millones de personas mayores de 65 años, y un total de seis mil personas supera los 100 años. Por lo que cada vez se necesita un mayor esfuerzo para cubrir las demandas de este colectivo. Subir la pensiones, gastar más en servicios de asistencia y expandir el voluntariado social son algunas de las demandas que se escucharon ayer.

No es complicado ver a abuelos enganchados a la Red, haciendo largos viajes o disfrutando de los videojuegos con sus nietos. La vejez evoluciona, y las cada vez más favorables condiciones de salud en la que encuentran estimulan el ocio y el entretenimiento. Los mayores tienen una imagen de sí mismos "bastante más positiva" de la que consideran que la sociedad tiene de ellos, según un informe realizado por Unión Democrática de Pensionistas y Jubilados de España. Según los datos, nueve de cada diez mayores se ven solidarios y un apoyo para los demás. Ocho de cada diez se perciben como personas cariñosas y divertidas, mientras que el 70% se aprecian como productivas y vitales.