Sociedad

Seseña se despide de Cristina Martín

  • Pese a que la familia deseaba incinerar el cuerpo, finalmente ha tenido que ser enterrada debido a que su muerte es objeto de investigación judicial.

Varios cientos de personas acompañaron este lunes a la familia y amigos de Cristina Martín durante la misa funeral y posterior entierro que se celebró hoy en Seseña (Toledo), tras haberse practicado ayer la autopsia a la niña, cuyo cadáver fue encontrado el sábado en este pueblo toledano.

La misa funeral se celebró en la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción, donde pasadas las 12.00 horas llegó hasta la puerta, junto con los familiares, el coche fúnebre con los restos de Cristina. El coche portaba ocho coronas de flores y varios ramos de flores pertenecientes a vecinos del residencial donde vivía la niña, de sus compañeros del IES Margarita Salas donde cursaba 1º de la ESO, del Ayuntamiento, de sus familiares y de sus amigos.

Una vez dentro, y con la parroquia y la plaza de alrededor llenas de gente, la misa fue oficiada por el párroco de Seseña Juan Triviño, acompañado de otros dos sacerdotes, que durante la homilía dio ánimos a la familia, consciente de que "tendrán que aguantar un gran dolor y llevar una pesada cruz de aquí en adelante", pero les recordó que tienen que "seguir cuidando de sus familiares y dando apoyo al resto de sus hijos". 

Durante toda la misa funeral se encontraron presentes dos psicólogas, que en algún momento se acercaron al banco donde se encontraba la familia para prestarles apoyo. Al término de la misa, no se realizó el rito de pésame a los familiares por expreso deseo suyo, según explicó el párroco, quien en nombre de la familia, mostró el agradecimiento a los asistentes.

Finalizado el funeral, el coche fúnebre, seguido de los familiares en otro vehículo detrás, se dirigió hasta el cementerio viejo de Seseña. Cientos de personas hicieron a pie el recorrido de casi tres kilómetros que separa este camposanto de la iglesia parroquial. Una vez allí, se procedió al entierro prácticamente en la intimidad, ya que la mayoría de las cámaras de televisión y periodistas permanecieron fuera.

A la ceremonia religiosa asistieron el alcalde del municipio, Manuel Fuentes, y miembros de la Corporación municipal; la secretaria general del PP y presidenta del partido en Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal; la consejera de Administraciones Públicas y Justicia, Magdalena Valerio, en representación del Gobierno regional; así como el vicepresidente de la Diputación de Toledo, Gustavo Figueroa, y el delegado de la Junta en Toledo, Fernando Mora. 

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