El pitbull que el pasado sábado mordió a tres niños en Toledo, uno de los cuales sigue ingresado en la UCI, tenía la rabia, según han detectado los análisis a los que ha sido sometido. Fuentes de la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales de Castilla-La Mancha han informado del resultado de la necropsia practicada al perro en el Instituto de Salud Carlos III. Las mismas fuentes han añadido que los menores afectados ya han sido vacunados y la Dirección General de Salud Pública ha comunicado el resultado del análisis a la Consejería de Agricultura para que adopte las medidas oportunas. La Consejería de Sanidad quiere hacer un llamamiento a todas las personas que hayan podido contraer la enfermedad por contacto con el perro para que acudan a un centro de salud.

La Consejería de Agricultura, por su parte, ha iniciado una encuesta epidemiológica para conocer dónde estuvo el perro en los últimos seis meses y ha comprobado que llegó desde Cataluña a la localidad toledana de Argés el pasado 22 de mayo, pocos días antes de que atacara a los menores. Dado que el período normal de incubación de la enfermedad es de un mes, la Junta trabaja con la hipótesis de que el perro llegara a Castilla-La Mancha ya enfermo, por lo que ha avisado a la Generalitat de Cataluña para que efectúe los controles pertinentes.

Las fuentes consultadas han subrayado lo insólito de la aparición de un caso de rabia en España y han apuntado la posibilidad de que el animal la contrajera en un país del norte de África. Por otra parte, las fuentes de la Consejería de Sanidad han indicado que el niño de dos años que resultó herido grave por el ataque del perro evoluciona favorablemente y probablemente este jueves pueda abandonar la UCI pediátrica del Hospital Virgen de la Salud de Toledo y pasar a planta.