La botellona volvió a repuntar con fuerza en Sevilla el pasado fin de semana. Prueba de ello son las 300 denuncias que interpuso la Policía Local durante las noches del viernes y el sábado, una cifra muy superior a lo habitual. En febrero, por ejemplo, la Policía cerró un fin de semana sólo con nueve denuncias, y rara vez durante el resto del año se sobrepasa el centenar.

El problema de la botellona es recurrente en la capital andaluza, y suele resurgir con fuerza al término del verano y principio del otoño, cuando empieza el curso tanto en Secundaria como en la Universidad. Son muchos los jóvenes sevillanos que ya no se marchan a la playa los fines de semana y se quedan en la ciudad. Como hace muy buen tiempo y las noches son muy agradables, es habitual que salgan y celebren botellonas en zonas como el entorno del río Guadalquivir.

Igualmente, los estudiantes venidos de fuera suelen salir a celebrar el inicio de curso con este tipo de eventos sociales, que consisten básicamente en consumir alcohol en la vía pública antes de entrar en algún establecimiento de ocio nocturno. La llegada de los Erasmus suele coincidir con un incremento de las botellonas en zonas como la Alfalfa o la Alameda de Hércules.

A esto se suma la concentración de personas en las horas previas de los partidos de fútbol del Betis y del Sevilla, en las que es habitual que cientos de aficionados celebren botellonas. En el caso de Heliópolis, un lugar en el que se hacen es el Parque del Guadaíra, provocando daños y suciedad en este espacio verde.

El propio delegado de Gobernación, Juan Carlos Cabrera, confirmó este martes la relación del inicio de curso con el problema de la movida. "Como viene siendo habitual, tras la finalización del periodo estival y con el arranque del curso universitario y de las clases en los institutos, se produce un repunte del fenómeno de la botellona", apuntó el concejal.

Para combatirlo, el Ayuntamiento activó un dispositivo especial con carácter preventivo para evitar y atajar las concentraciones de personas consumiendo alcohol en la calle. "Un dispositivo que seguiremos activando durante los próximos fines de semana y que complementa la labor que la Policía Local de Sevilla ya viene realizando en esta materia a la vez que se atiende y se da cobertura a la amplia agenda de actos que tienen lugar en la ciudad", añadió Cabrera.

Además de las 300 denuncias por botellona, la Policía Local precintó tres actividades e interpuso otras siete sanciones por molestias ocasionadas por los ruidos. Entre el sábado y el domingo, la Policía llevó a cabo 33 intervenciones para prevenir y controlar el consumo de alcohol en la vía pública. Estas intervenciones, que se han realizado en diferentes puntos de la ciudad, tuvieron como resultado un total de 200 denuncias en la madrugada del sábado y de otras 100 en la del domingo.