El uso del bonobús en el transporte urbano creció de media un 45% durante los meses de octubre y noviembre, según ha informado el Ayuntamiento de San Fernando, que relaciona dicho incremento con el descuento del 30% que se viene aplicando desde el pasado mes de septiembre gracias a las subvenciones promovidas desde el Gobierno central. El dato mejora incluso los datos del año 2019, antes de la pandemia. 

Las cifras del uso de este abono de transporte en los meses de octubre y noviembre han sumado 51.239 bonobuses utilizados, frente a los 35.589 de 2021, los 30.189 de 2020 (el peor año de la pandemia con restricciones a la movilidad) y los 44.216 de 2019.

Eso supone más de un 45% por encima que el pasado año, un 70% más que en 2020 y cerca de un 17% respecto al año previo a la llegada del Covid-19.

Esos buenos resultados han llevado ya al Consistorio isleño a destacar el éxito de la medida de adherirse a la subvención del Gobierno central, convocada a través del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (MITMA), para promover el uso del transporte público, para responder a las consecuencias económicas derivadas del conflicto bélico en Ucrania y hacer frente a situaciones de vulnerabilidad social y económica.

Un autobús urbano de San Fernando durante su recorrido por La Isla.

Con esta medida que bonifica el precio del transporte público colectivo a los viajeros habituales se persigue incentivar el transporte público colectivo para hacer frente al escenario actual del alto precio de la energía y los combustibles, que afecta directamente a la movilidad cotidiana de la ciudadanía. También pretende fomentar el cambio a un modelo de transportes más seguro y sostenible que el vehículo particular, acorde con los objetivos de desarrollo sostenible y la Agenda Urbana.

Hay que recordar que el descuento del 30% aplicado en San Fernando supone que el precio del viaje del bonobús ha pasado a costar de 0,75 céntimos a 0,525 céntimos y la tarjeta de estudiantes que hasta ahora costaba 30 euros al mes ha pasado a costar 21 euros.

En San Fernando, además de esta medida promovida por el Gobierno central y aplicada en los municipios y comunidades autónomas, el Ayuntamiento de San Fernando suma el hecho de que mantiene congelado el precio del transporte urbano desde el año 2018. Así, desde entonces el precio del viaje ordinario cuesta 1,10 euros.

El delegado de Presidencia, Conrado Rodríguez, ha puesto de relieve que "no se trata solo de acciones para mejorar la economía de las familias, sino que también es una satisfacción comprobar que las medidas a favor de la movilidad sostenible tienen cada vez mayor calado entre la ciudadanía".

En esta tesitura, el edil ha insistido en que "este gobierno municipal viene apostando por el transporte público para hacer de San Fernando una ciudad más sostenible, libre de humos, con menos circulación del vehículo privado y en la que haya una reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero (con un descenso de más de 25%)".

"Es por eso que desde el año 2018 no hemos subido los precios del servicio de transporte urbano. Pero también hemos tomado otras medidas como la renovación de la flota de autobuses urbanos con tres vehículos eléctricos híbridos, e incluso en el caso del uso del coche privado contamos con rebajas fiscales para fomentar que sean eléctricos o ecológicos y sostenibles con el medio ambiente, así como otras acciones como la ejecución de la red de aparcamientos tácticos o el desarrollo de las supermanzanas", afirma. 

Rodríguez ha añadido que con ese objetivo también se ha aprobado ya de forma inicial la nueva Ordenanza Municipal para una Movilidad Amable y Sostenible, una normativa que avanza en la apuesta de dar un lugar secundario a los vehículos para crear las condiciones que permitan una movilidad amable con las personas y que sea sostenible y luche contra el cambio climático.