El Ayuntamiento de San Fernando ha tenido abiertas sus puertas todo el verano a los visitantes. De lunes a viernes en horario de mañana, además de las actividades especiales que también lo hacían visitable por las tardes, los ciudadanos que se acercaban a sus puertas podían disfrutar de una visita guiada. Esta disponibilidad ha contribuido a que las Casas Consistoriales se hayan convertido durante la temporada estival en el segundo monumento más visitado de la ciudad, solo por detrás del Panteón de Marinos Ilustres situado en dependencias de la Armada en el poblado naval de Carlos.

Hasta 1.345 personas se han acercado entre junio y agosto a este inmueble histórico, según los datos que maneja la Oficina Municipal de Turismo. Esta cifra incluye a quienes disfrutaron de la Noche Blanca el pasado 12 de agosto, pero responde las visitas guiadas sin cita previa que desde mayo están a cargo de Rosa Aleu, que reconoce que "la experiencia ha sido enriquecedora". Aunque estudió Turismo no había trabajado antes de guía. La oportunidad le llegó con el plan de empleo covid de la Diputación Provincial.

Su balance es positivo y considera que también lo es para quienes participan en estos recorridos. "Intentamos hacerlos amenos, pero es bueno dar alguna pincelada de historia tanto del edificio como de San Fernando", apunta. Una introducción sobre el inmueble da paso a detalles sobre su historia y sobre la historia de Las Cortes de La Isla. "La fiesta se recuperó con el 24-S, pero es bueno conocer la historia", subraya. También habla de la reforma. "Hay quien pregunta cuánto ha costado", comenta entre risas.

Algunos preguntan cuánto tardó en construirse y otros quieren ver más cosas e ir por zonas no habituales o incluidas en la visita. "Les encanta la sala Isabelina que incorporamos los últimos tres meses", cuenta. En agosto, durante las vacaciones de la alcaldesa, Patricia Cavada, se ha podido visitar su despacho. "La sala Mudéjar es una maravilla", añade. En la primera planta disfrutan de la parte más antigua, donde estaba la Policía Local, y el contraste con la parte más moderna, con el salón de actos, el área cultural. "La Biblioteca Lobo no es visitable, pero se les cuenta quién era y por qué donó su biblioteca. Muchos desconocen que está en el Ayuntamiento", aclara Aleu. Cuando pasan a la zona noble, con la escalera imperial y los tonos pasteles ya es admiración.

"Les sorprende que el edificio tenga tanta historia. Es desconocido que aquí se elaboró la fórmula del juramento por los que aún no eran diputados", desvela. Tanto locales como visitantes de fuera atienden con interés a esos comentarios históricos. Los calabozos, si el grupo es muy numeroso, dado que no son un espacio grande y tienen poca ventilación no se visita, "solo si alguien que vaya en el grupo tiene mucho interés".

La media es de 17 personas por visitas este verano, cuando se han llevado a cabo un total de 78 recorridos guiados para un total de 1.345 personas. Sobresale con más de la mitad de los visitantes acumulados el mes de agosto, con hasta 688. De ellos 175 se contabilizaron durante la Noche Blanca. En julio fueron 249 y en junio 408. En este último mes a las visitas de particulares se suman las de colectivos, de ahí la cifra que registra.

Con los datos que maneja Turismo el Ayuntamiento se ha convertido este verano en el segundo punto de interés de La Isla más visitado, con el Panteón de Marinos Ilustres en primer lugar, algo habitual puesto que el patrimonio de la Armada tiene un gran tirón –también el Observatorio de Marina o Torre Alta, entre otras opciones–.