Con la llegada de agosto se culminan todos los cambios provisionales de las vacaciones. Reformas de contenidos y relevos de rostros conductores.

Así, Cuatro cambia hoy de hilo conductor matinal. Ahora es Ruth Jiménez quien llega al plató de Las mañanas de Cuatro, como sustituta de Marta Fernández. La ex presentadora de No disparen al pianista en La 2 asegura que está un poco nerviosa, aunque siempre ha estado vinculada al mundo de la información generalista, a pesar de lo que muchos puedan pensar. "La gente siempre recuerda lo último en lo que has trabajado, pero mi universidad fueron los informativos que estuve realizando en Barcelona. Allí aprendí muchísimo", recalca. Se percibe a través de sus palabras su estado acelerado y su entusiasmo; acaba de estar en plató empapándose de todo y el día ha sido intenso. "Me siento muy bien y siempre me han gustado los contenidos de esta cadena, así que estoy encantada con este trabajo".

Esta catalana de 34 años y rostro dulce ha llegado con muchas ganas de trabajar, ya que ha estado retirada durante algún tiempo debido a su reciente maternidad, la cual la ha sumido en un burbuja donde solo estaban sus "dos hombrecitos". Su hijo, que nació a primeros del pasado año, Julio; y su pareja, el controvertido publicista, y ex jurado del programa Operación Triunfo, Risto Mejide, del que, afirma, le ha ayudado mucho durante este periodo de retiro laboral, que le ha sentado muy bien.

Su andadura profesional ha sido extensa, desde que comenzara en la catalana TV3 con un programa parecido a España Directo. Ha presentado distintos formatos como Ticket, en la Sexta, o No disparen al pianista, en La 2, un programa dedicado a la actualidad e información musical. Después de su faceta de reportera, Ruth ha descubierto el mundo del entretenimiento y piensa que no le ha ido de todo mal. "Siempre he tenido predilección por los magacines", dice entre risas, "y parece que me ha llegado el momento".

No faltan palabras para Marta, que le ha ayudado mucho durante esta semana mientras intentaba ponerse al día. El programa no cambia su esencia, como se puede observar en el resto de ofertas para el verano, así que el trabajo es más intenso. Continúan el debate, las secciones y los colaboradores. "Le he preguntado muchas dudas y ella me las ha resuelto. Es un trabajo donde dedicas muchas horas a la actualidad, mucho tiempo delante del ordenador. También ha intentado tranquilizarme", asevera Ruth.

Se autodefine como una madre coraje y más autoritaria de lo que hubiera pensado nunca y posiblemente sea cierto, ya que intenta llamar a su hijo todo lo que puede. Quedarse sin verano no le preocupa en absoluto porque está haciendo lo que quiere hacer, y después del trabajo estará con su familia todos los fines de semana. "Al principio todo cuesta pero los que estamos acostumbrados a trabajar delante de las cámaras somos un poco 'yonkis' y de esta forma soltamos adrenalina", bromea .

La nueva presentadora de Las mañanas de Cuatro se siente "madre orgullosa", lo que se vislumbra detrás de unas palabras dulces que tienen como epicentro el núcleo de una familia. Una familia, la de Risto, que a pesar de lo que se pueda pensar es más normal de lo que nos han podido mostrar en algún momento las cámaras o los explotados shows televisivos.