Fue una brillante ganadora de MasterChef Celebrity, en duelo con Paz Vega, flamante mamá y por ahora deja el deporte por la restauración. Ona Carbonell ha fichado por Grupo Nomo para convertirse así en chef profesional y sumarse al equipo creativo de esta firma.
Acaba de dar a luz en Badalona a su hijo Kai (que se traduce como “mar” en hawaiano y “victoria” en chino) fruto de su relación con el ex futbolista Pablo Ibáñez.
La siguiente noticia de Ona es su fichaje por el restaurante Nomo Braganza, de dicho grupo y que se ubica en la calle Bárbara de Braganza de Madrid, primer local madrileño de una empresa que se decanta por la “fusión asiático-mediterránea”. La incorporación de la campeona viene a impulsas su popularidad en la oferta de la capital, tan sinuosa en estos meses de pandemia.
El chef de Nomo Braganza es Naoyuki Haginoya. Nao y Ona forman así pareja en una sonora composición de sus nombres.
La inspiración nipona dela nadadora le llega por su pasión por este país y por su entrenadora. Su nueva misión será la de fomentar nuevas creaciones desde la gastronomía japonesa para enlazarla con la española.
“Junto al chef crearé cada mes o cada dos meses platos nuevos, me hace mucha ilusión no solo ser socia sino poder también llevar a cabo en el restaurante todo lo que he aprendido”, ha expresado Ona este viernes a raíz de anunciarse su incorporación.
Carbonell se embarca a esta aventura gastronómica “desde la admiración por los que se dedican al gremio”. “La cocina es arte al igual que la natación sincronizada. Esa parte artística de poder con colores, sabores y texturas hacer disfrutar y emocionar a las personas creo que es muy bonita”, valora la medallista, que propondrá también platos saludables, tal como marcan los planteamientos de la cocina japonesa.
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