Esta es una ficción sobre mujeres en el siglo XVIII creada, producida y protagonizada por mujeres.

Liv Tyler (Nueva York, 1977)es en Harlots.Cortesanas Lady Isabella Fitzwilliam, una poderosa noble que se convierte en presa de Lydia Quigley (Lesley Manville). El contexto de Harlots son los prostíbulos londinenses de hace tres siglos y esta producción histórica de Hulu se emite los jueves por la noche en el canal Cosmo, en las plataformas de pago, que acaba de estrenar su tercera temporada. Tyler intervino en la saga de El señor de los anillos y en series como The Leftovers y desgrana para esta web qué esperar de cara a los nuevos capítulos.

–Su personaje se incorporó la temporada pasada ¿cómo evoluciona?

–Lo va a pasar mal. Sus amistades o aquellos que cree que son sus buenos amigos se pondrán en su contra y no la aceptarán. Su actitud escandaliza y desde ese momento empieza a vivir su vida y se hace amiga de otras mujeres. Comienza a vivir sola y tiene una mayor independencia económica y sexual.

–El personaje con el que tendrá más vínculo será Lydia...

–Lydia crece mucho. Se convierte en una gran mujer. Y es un personaje fascinante por la manera en la que Lesley Manville la interpreta: la odias, no puede ser de otra forma, pero al mismo tiempo sufres por ella. Creo que su historia es muy interesante.

–¿Cómo es su relación con el personaje clave de Charlotte Wells (interpretado por Jessica Brown-Findlay)?

–Siempre hay que tener alguien en tu vida que te haga volar y que te cambie las perspectivas, que te abra un nuevo mundo. Eso es lo que siente mi personaje por Charlotte en ese ámbito de la prostitución de hace tanto tiempo.

–¿Cómo se ha reencontrado usted con Lady Isabella Fitzwilliam?

–Siempre es maravilloso recuperar a un personaje, volver a interpretarlo, porque tienes la ventaja de verlo con perspectiva: porque llevas sin vivir con él los meses que no lo has interpretado. Cuando lo recuperas, piensas en si podrás hacer algo diferente. De Harlots siempre me ha encantado la ropa, el peinado, el maquillaje. También para mí poder poner acento londinenses. Es un personaje entrañable y muy divertido.

–¿Hay muchos más motivos para seguir la nueva temporada?

–Sin duda. El guion sigue siendo increíble. En otras series hay un par de personajes principales pero aquí hay tantas mujeres y tantas historias que me encantan... La manera como se sostienen entre ellas en un mundo tan machista, y a pesar de todas las locuras que les ocurren, es uno de los aspectos más interesantes de este drama de época.

–¿Al evolucionar su personaje también cambia el vestuario?

–Antes mi personaje tenía un toque más formal y ahora es más revolucionario y moderno. Mientras los guionistas me están trasformando pienso en lo que puedo llegar a cambiar en tan solo unos minutos y me sorprendo.

–¿Una ficción tan arriesgada como Harlorts guarda muchas lecciones?

–Le aseguro a los espectadores españoles que esta serie es muy fiel a la realidad. No se idealiza nada, comprendes que nadie tiene experiencias ni vidas perfectas.

–Hablaba de su acento londinense en la ficcion que habría que descubrir en la versión original ¿cómo lo adapta una neoyorquina?

–He interpretado a personajes británicos en otras ocasiones. Hay que trabajar cada línea, cada sonido. Es un desafío aunque he hecho personajes así desde mi juventud.

–¿Harlots es una serie feminista?

–Es muy feminista. A su manera estas prostitutas son las mujeres más libres de Londres. Me alegra interpretar un personaje que está escrito por una mujer, porque de lo contrario podría ir en una direcci