La plataforma Netflix está probando fórmulas para evitar que en el tiempo de elección de los espectadores se produzca hartazgo y, por tanto, desconfianza progresiva hacia la amplia oferta de su catálogo. La compañía líder en streaming estudia incorporar canales en línea convencionales con sus contenidos para esos seguidores de la televisión tradicional, de parrilla, que no desean complicarse en prescripciones y sugerencias. Esos canales no tendrían interrupciones publicitarias.

Netflix Direct se está probando desde hace unos días en Francia, entre determinados clientes, para comprobar si la oferta en línea recibe interés y qué tipos de contenidos se pueden ir integrando en ese canal de programación preparada, con su prime time y sus franjas horarias.

Frente a los maratones de capítulos, los llamados atracones, de los estrenos, que fueron el primer aliciente con que proponía Netflix atraer a sus clientes se ha pasado a un consumo diverso que obliga en los casos más conservadores a dar pasos atrás y atenderles con una oferta en línea tradicional.

La útima plataforma en incorporarse en nuestro país ha sido Pluto TV, de Viacom, servicio gratuito con más de 50 canales en línea (incluido uno exclusivo de Curro Jiménez) y que espera ampliar a un centenar de ofertas en el plazo de un año.