La Euphoria sueca parece no tener rival en Eurovisión. La cantante Loreen, una Celine Dion al ritmo de Madonna, se ha ganado a los eurofans y las casas de apuestas no arriesgan ante el tema de Suecia y, por tanto, lo alzan como campeón. Eso sí, la sueca deberá pasar por la segunda semifinal antes de llegar a la final del sábado 26 mayo, en el que la canción española tiene la plaza asegurada, en el 19º puesto del orden de intervención. La gala que se celebrará en Bakú, la capital de Azerbaiyán, país ganador del pasado año, contará con la sevillana Pastora Soler y una balada para que la voz se luzca, Quédate conmigo. La representante española, a diferencia de lo que venía sucediendo en las últimas ediciones, está bien posicionada en los pronósticos de los aficionados, como ha anunciado el sondeo Eurochart. La totalidad de los portales de apuestas colocan a la sevillana entre el 7º y el 8º lugar, por lo que las espadas están en todo lo alto para hacer un buen papel en el Cáucaso, aunque la victoria se presenta difícil ante Suecia, cuya victoria se paga en torno a 3 a 1, dando mucha seguridad a lo que decida público y jurado.

La italiana Nina Zilli, una voz que evoca a las grandes cantantes afroamericanas, es la segunda favorita de este festival con L'ammore è femmina. Italia es otro de los países del Big Five que está clasificado directamente para la final del sábado. Una actuación realmente friki pero con gancho es la de las abuelas Buranovskiye Babushki con la pachanga Party for every body, y son las favoritas de la primera semifinal del certamen que arranca dentro de dos semanas. Hay momentos en el que tema de estas chikilicuatres parece cantado por gatos cabreados pero la victoria rusa se paga 7 a 1, como un tema de calidad como el de Italia, segunda y terceras entre los apostantes.

Una victoria española se paga entre 14 a 1 o 21 a 1, según los distintos portales de apuestas. Por delante de la canción española están las estimaciones que se decantan por la canción del Reino Unido, la del veterano Engelbert Humperdinck, baladista recuperado así para las nuevas generaciones, que interpretará Love will set you free. A sus 76 años este cantante británico se convertirá en el intérprete en solitario más longevo en acudir a Eurovisión (y el récord en conjuntos lo consiguen las abuelas rusas).

Serbia es la quinta favorita con un Enrique Iglesias de los Balcanes, Željko Joksimovic; por delante de Dinamarca, con la joven Soluna Samay y Should've known better. Las casas de apuestas incluyen las aspiraciones españolas en un apretado grupo formado por Chipre, Islandia, Irlanda y Alemania.