El Fandi y Castella salieron por la puerta grande en el quinto festejo del abono de la feria de la Virgen de los Llanos de Albacete.

Se han soltado cuatro toros de Núñez del Cuvillo y dos -quinto y sexto- de El Torreón, bien presentados y buenos, con la excepción del desrazado primero.

Juan José Padilla: media ligeramente tendida y seis descabellos (silencio tras aviso); y estocada (oreja). El Fandi: pinchazo y estocada (oreja tras aviso); y estocada (oreja). Sebastián Castella: estocada (oreja); y estocada (dos orejas tras aviso). Tres cuartos largos y calor.

Padilla abrió con el toro de menos opciones del envío, sin transmisión ni continuidad en las embestidas, y brilló únicamente con las banderillas, pues en el último tercio solo pudo dar pases sueltos. En el cuarto, en el que no puso banderillas, anduvo más reunido en una faena premiada con una oreja, y cuyos pasajes de más entidad brotaron al natural.

El Fandi toreó a su primero con emocionantes chicuelinas de rodillas. Con los palos formó su lío habitual y llevó a cabo una faena de buen son ante un toro sin raza. Redondeó la tarde en el quinto, al que recibió con largas cambiadas en el tercio, y al que, tras el espectáculo en banderillas, cuajó una faena que conectó con el tendido por lo bien que la vendió.

Castella toreó con gusto, temple y ligazón a su primero, que se dejó. Lo mejor llegó en el sexto. Buen toro con el que calentó con su pendulazo de apertura. Faena de mucha enjundia por lo largo y despacioso que toreó una faena tan larga como interesante.