El matador de toros José Antonio Morante de la Puebla cortó en Córdoba cuatro orejas y un rabo, en la última de la Feria de Nuestra Señora de la Salud, en una tarde en la que Juan Serrano Finito de Córdoba obtuvo un trofeo y Manzanares se fue de vacío, tras lidiar un noble encierro de Juan Pedro Domecq.

Se lidiaron reses pertenecientes a la ganadería de Juan Pedro Domecq, correctas de presencia y, en general, muy nobles y de buen juego. Segundo, tercero y quinto, más encastados. Primero y sexto, justos de fuerza. El cuarto, el más deslucido.

Finito de Córdoba, oreja tras aviso y ovación. Morante de la Puebla, dos orejas y dos orejas y rabo. José María Manzanares, ovación y ovación. Casi lleno en tarde de temperatura agradable.