Juan Antonio Ruiz 'Espartaco'. torero

"Era una persona ejemplar y para mí un Ángel de la Guarda"

"Era una persona ejemplar y para mí un Ángel de la Guarda"

"Era una persona ejemplar y para mí un Ángel de la Guarda" / juan carlos muñoz

El maestro Juan Antonio Ruiz Espartaco, quien fue atendido en distintas ocasiones por Ramón Vila tras cornadas sufridas en varias plazas, refiere sobre el cirujano taurino: "Era una persona ejemplar y daba seguridad y motivación. En pleno verano, si tenías un percance y le llamabas para que atendiera abandonaba sus días de descanso venía de inmediato para atenderte. Te revisaba las heridas una y otra vez. Cuando estaba en la plaza, para mí era un Ángel de la Guarda porque me sentía más tranquilo a la hora de enfrentarme al toro".

El diestro, en su relación personal, rememora al doctor Vila como "una persona muy seria y muy amable. Y siempre trataba a todos con respeto. Se alegraba de todo lo bueno que sucediera a los toreros. Cuando se va un gran amigo siempre alabamos sus virtudes. Pero es que don Ramón Vila tenía todas esas cualidades".

Espartaco habla de su experiencia desde el punto de vista del paciente: "Me atendió de cuatro o cinco cornadas de consideración y además de otras heridas sufridas fuera de Sevilla. En mi caso, la más fuerte que don Ramón me curó fue una cornada en el hombro que me propinó en la plaza de Teruel un toro de Conde de la Maza y me vine a Sevilla y aquí me volvió a operar de nuevo a la mañana siguiente. Tenía una herida grande en la axila y me recuperé muy pronto porque además de su labor como médico es que me daba una motivación especial para recuperarme y volver a torear".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios