esús Capitán ‘Capi’ repasó ayer la actualidad azulina, y no ocultó que la última derrota ha hecho bastante daño al plantel. El sevillano indicó ayer que “está claro que no estamos en la situación que queríamos, y aunque el equipo está ofreciendo una imagen muy buena es cierto que lo importante son las victorias. Con eso nos quedamos, el tema de ganar partidos pasa por seguir jugando igual. El otro día necesitábamos ganar, no se hizo y bueno, ahora mismo estamos un poco decaídos pero ya pensando en el Valladolid”.

Preguntado sobre si mira la clasificación, el mediocentro destacó que “hay que mirarla porque es la realidad y la realidad no se puede ocultar, pero también es verdad que esto es muy largo, quedan muchísimos partidos. El año pasado, por ejemplo, había equipos que a estas alturas estaban en puestos de ascenso como el Salamanca y al final descendieron. Esto cambia mucho, aunque sí es verdad que el equipo ha tenido días en los que ha merecido más puntos y otros, como el del otro día contra al Almería, en el que no merecimos ganar, pero sí al menos empatar”.

Del próximo rival, comentó que “es complicado, como lo son todos en Segunda División. El año pasado se metieron en liguilla de ascenso y este año también pelearán por estar. Tiene jugadores de calidad pero debemos seguir confiando en nosotros porque el equipo está dando una imagen buena. Lo importante es no cambiar la forma de jugar sino tratar de que lleguen los resultados”.

Sobre las últimas actuaciones arbitrales, Capi señaló que “en algunos partidos nos han perjudicado, pero tampoco nos ha entrado la pelota. El fútbol es esto y a veces las metes y otras no y otras el árbitro te quita y en otras te da. Lo único que debemos tener claro es que a esto se le puede dar la vuelta y para ello hay que ganar en Valladolid”.

En relación al estado del terreno de juego dijo que “no acompaña mucho, pero no podemos ponerlo como excusa porque los dos equipos tenemos que jugar ahí”.

Para terminar, se refirió a los constantes cambios de horarios. “Estamos mareados de tantas horas, nos falta jugar a las tres de la mañana. Yo la verdad es que echo de menos los dominguitos a las cinco de la tarde”.