xerez cd | cd mirandés · así se vivió el partido en chapín

Primera gran bronca azulina

La primera bronca de la temporada ha llegado pronto. Tan sólo han pasado tres jornadas para que la afición cargue contra su equipo, algo normal viendo el paupérrimo encuentro ofrecido ayer. Pocos se libraron de la quema, pues hubo pitos para casi todos, unos más como Tato, David Prieto e Israel, y otros menos, pero en líneas generales, todos.

Y es que no era para menos el enfado de la hinchada viendo cómo otro recién ascendido hacía historia en Chapín. Si hace dos años fue el Cartagena (1-4), el pasado año, el Guadalajara (0-2), que marcó aquí su primer gol en la categoría, ayer se repitió la película, pero esta vez para el Mirandés, que hasta entonces no había sumado ningún punto ni había hecho ningún gol. Vaya por Dios.

Un dato resume el mal bagaje del Xerez, y fue que el equipo disparó por primera vez entre los tres palos en el minuto 85. Lo hizo por medio de Adrián, que espoleó algo el juego con su entrada.

Lo demás, para olvidar pues desde el primer instante se vio a un Xerez inoperante, impreciso en el juego y que nunca encontró su sitio en el campo. Apenas hubo juego en mediocampo, ni tampoco entradas por bandas, pero lo más grave fue que nadie en el Deportivo fue capaz de dar un pase interior. Ni siquiera el reestreno de Rafa García, otrora fundamental en la zona ancha, sirvió para canalizar algo la circulación de balón.

Viendo el panorama, al público no le quedó otra que reconocer el juego y los goles del rival, al que ovacionó al final del encuentro y durante muchas fases del mismo. En concreto, los aplausos tuvieron un destinatario, el mediapunta Pablo Infante, autor de dos goles. Humilde como el que más, el capitán del Mirandés fue incluso objetivo de muchos recogepelotas, que quisieron fotografiarse con él.

Fue lo único a lo que acogerse, porque en el Xerez no se salvó casi nadie. Lo bueno, como dice Esteban, es que aún estamos en la jornada 3.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios