La temporada 17/18 se cerró para el Xerez Club Deportivo el pasado domingo en El Rosal frente al Cádiz B con una derrota pero ya, afortunadamente, con la categoría salvada. Ahora, a la entidad azulina le queda lo más complicado, trazar su plan de trabajo para encarar el curso 18/19 de una forma totalmente diferente al que ya está tocando a su fin, que ha sido el más desastroso del último lustro. A la mala marcha del equipo a nivel deportivo, se unieron los problemas institucionales y económicos.

La prioridad del XCD con los nuevos dueños ya al frente y la colaboración de Afición Xerecista es la de solventar el tema de los campos para entrenar y jugar. Pretenden alcanzar un acuerdo con el Ayuntamiento, que pasa por avalar la deuda correspondiente a las liquidaciones por el uso de instalaciones (más de 160.00 euros) para poder regresar a Jerez. Eso permitiría al club entrar de nuevo en convocatoria.

Otro de los asuntos pendientes y que están intentando resolver cuanto antes es el de las deudas con la plantilla. Los jugadores cobraron hace poco cuatro mensualidades gracias al Fondo de Garantías de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) pero aún les resta por percibir las compensaciones de varios meses. Además, esa cantidad la tiene que devolver el club a la AFE o negociar la forma de pago antes del inicio del próximo curso.

A nivel deportivo, la entidad está pendiente de la decisión que adopte Juan Pedro Ramos. El entrenador xerecista ha terminado la campaña muy cansado mentalmente tras el desgaste por tardar tanto en lograr la permanencia y no tiene claro si seguir al frente de la plantilla o tomarse un descanso. En principio, el agotamiento debe dar paso a la ilusión por afrontar una nueva campaña en Tercera en su club de toda la vida.

Una vez que decida si continúa, el Deportivo comenzará a planificar la pretemporada y a configurar una plantilla que necesita bastantes retoques después de lo sucedido durante esta campaña.

Por último, a nivel de cantera, los equipos de Afición Xerecista ya pertenecerán al club, con lo que los futbolistas podrán ser utilizados tanto por el primer equipo como por el juvenil.

La intención es la de ampliar el número de equipos hasta once y también la de apostar firmemente por el fútbol femenino, una sección que podría llegar a tener hasta dos conjuntos.