El Xerez Deportivo ha tenido que tirar de jugadores cedidos una temporada más para poder completar su plantilla y esta vez se ha encontrado con un serio problema, que está en Primera División y no todos los clubes de la máxima categoría permiten a sus futbolistas enfrentarse a sus clubes de procedencia.

Así, los azulinos no podrán contar ni con Aythami Artiles ni con Álex Bergantiños cuando dentro de una semana el Deportivo de La Coruña visite Chapín. Bueno, sí lo podrá hacer si paga a César Augusto Lendoiro 150.000 euros por cada uno de ellos, según una cláusula en el contrato de cesión de los coruñeses.

En el caso del Sevilla ocurre algo similar. Ni David Prieto, ni Casado ni Emiliano Armenteros podrán enfrentarse a los hispalenses en ninguno de los dos encuentros que tienen que jugar.

La entidad que preside José María del Nido lleva ya bastantes temporadas implantando el sistema de no permitir a sus futbolistas jugar, salvo que los equipos de destino pasen por caja.

La pasada temporada, el Málaga intentó por todos los medios que Duda, centrocampista cedido por el Sevilla, pudiese jugar los dos encuentros e incluso intentó rebajar la cláusula establecida por la falta de liquidez pero no lo consiguió.

Casado, la pasada temporada en las filas del Recreativo, tampoco pudo medirse a su equipo, y tenía la misma cláusula de penalización, 150.000 euros.

Mientras, Renan y Víctor Sánchez se encuentran en el otro lado de la balanza. Valencia y Barcelona les han cedido para que tengan minutos y no han incluido esa cláusula de impedirles jugar estos partidos, que seguramente serán bastante especiales para ellos. De este modo, tanto el guardameta como el centrocampista, si José Ángel Ziganda lo estima oportuno, estarán en esos choques.